Los nuevos radares que multan ya en obras a muy baja velocidad, funcionan y podrían ser permanentes

La nueva estrategia de colocar radares en tramos en obras para multar a baja velocidad como medida de protección contra los trabajadores, hasta ahora en pruebas por la DGT y otras administraciones mundiales, parece sin duda que funciona y podría convertirse en una política activa de control de velocidad.

Gracias a su pequeño tamaño, los radares Velolaser pueden esconderse con facilidad en cualquier sitio
Gracias a su pequeño tamaño, los radares Velolaser pueden esconderse con facilidad en cualquier sitio

La nueva técnica de colocar radares en tramos de carreteras con obras para controlar la velocidad de paso de los vehículos y proteger a los operarios de atropellos en las vías durante sus trabajos de reparación parece que funciona y que podría seguir extendiéndose tras sus primeras pruebas. Así podemos ya constatarlo a tenor de los primeros resultados obtenidos por este nuevo método de vigilancia.

En España, la DGT ya ha ido avanzando en este terreno en el último año. Anunciada esta nueva técnica por primera vez durante la pasada primavera de 2024, cuando el propio director general de Tráfico, Pere Navarro, en una Comisión de Seguridad Vial del Congreso de los Diputados confirmaba que estaban ya “trabajando con radares móviles para colocarlos donde hay obras, ponerlos a 60 km/h con un gran cartel anunciando que la velocidad en el tramo de obras está controlado por radar”, los primeros resultados llegaron en verano tras poner la operación en marcha durante una de las operaciones salida con motivo de las vacaciones.

Controles de radar de la DGT a "velocidad más baja y en ubicaciones completamente nuevas"

Entonces, confirmando una velocidad de control “más baja y en una ubicación completamente nueva”, desde la DGT confirmaban detectar que “hasta 8 de cada 10 vehículos en circulación por estos tramos excede la velocidad máxima y específica que se aplica en los tramos de obras que hay en nuestras carreteras”, dando como resultado en solo una semana de campaña especial hasta 10.173 denuncias por incumplir los límites en este tipo de tramos que contaban ya con radar.  

Últimamente se están instalado muchos radares en las zonas de obras
La DGT calibró los primeros radares en obras para multar a partir de solo 60 km/h.

La cifra, muy alta, se consideraba como un paso previo importante para tratar de reducir la velocidad en este tipo de carreteras, que solo en 2023 registraron, según el Registro Nacional de Víctimas de Accidentes de Tráfico, hasta 172 siniestros en el que se vio involucrado especialmente el personal de mantenimiento y conservación y los operarios que trabajan caminando por la calzada en este tipo de obras. La DGT, entonces, confirmaba que seguiría poniendo en práctica este tipo de técnicas de control de velocidad en tramos con obras, especialmente los que afecten a la calzada y/o modifiquen el trazado de los carriles, incluyendo tramos en túneles.

Las pruebas de radares en obras en Estados Unidos, todo un éxito

Pues bien, hoy hemos conocido que esta misma técnica lleva también tiempo ya en fase de pruebas en Estados Unidos, con resultados tan satisfactorios que las administraciones valoran ya que la estrategia de ubicar radares de velocidad en zonas de trabajo y obras se convierta, definitivamente, en permanente. Así lo han asegurado en las últimas horas, por ejemplo, tanto la Autoridad de Autopistas del Estado de Nueva York como el Departamento de Transporte, tras celebrar el éxito del denominado como Programa Piloto de Aplicación de la Velocidad en Zonas de Trabajo Automático, ejecutado con presupuesto estatal y cuya fase inicial concluye este próximo día 1 de abril.

Las autoridades estatales de Estados Unidos valoran que, durante esta fase de control con radares, “no se han registrado lesiones o muertes de trabajadores en zonas monitorizadas por cámaras durante los dos primeros años del programa”. Este programa arrancó en 2021 con el objetivo de convertirse en una futura ley tras constatarse que, solo en el estado de Nueva York, hasta 50 trabajadores resultaron ese año heridos por automóviles que ingresaban en los tramos con un importante exceso de velocidad.

Zona de obras en la carretera
Estados Unidos ha comenzado a instalar radares también en carreteras con obras.

Así son las multas por exceder la velocidad en tramos de obras

Inicialmente, el programa instaló hasta 30 radares móviles de control de velocidad en este tipo de tramos y, aunque el proyecto contemplaba 5 años de pruebas, pasados solo los dos primeros las autoridades consideran que los resultados ya demuestran por completo su eficacia. “En los dos años que este programa ha existido, hemos visto un cambio en el comportamiento de los conductores”, ha señalado Frank Hoare, director ejecutivo de la Autoridad de Autopistas de Nueva York. “Los datos lo avalan. Hemos visto que la gente va más despacio y un elemento importante de este programa pide que las tarifas generadas por las violaciones vayan directamente a los programas de seguridad”, concluye en su primer balance.

El programa llevado a cabo en Estados Unidos sanciona con una multa de 50 dólares al conductor que excede por primera vez la velocidad en uno de los tramos en obras controlados, incrementando la sanción a los 75 dólares si es reincidente en el plazo de los 18 meses siguientes. En caso de contabilizar tres o más denuncias por ese mismo hecho en el período citado de un año y medio, cada nueva infracción se castiga con 100 dólares. Los informes de las autoridades aseguran que la recaudación desde que se inició el programa asciende ya a 11,7 millones de dólares.

 

Archivado en:

La DGT cumple su aviso y activa radares móviles en carreteras con obras para multar a baja velocidad

Relacionado

La DGT cumple su aviso y activa radares móviles en carreteras con obras para multar a baja velocidad

Los radares en obras son el último escondite de la DGT para multar por velocidad y así se ocultan

Relacionado

Los radares en obras son el último escondite de la DGT para multar por velocidad y así se ocultan