La nueva [Ordenanza de Movilidad Urbana de Madrid](https://www.madrid.es/UnidadesDescentralizadas/UDCMovilidadTransportes/Quizas/NuevaOrdenanza/ficheros/Textoarticuladoordenanza movilidad20180724final.pdf) va a provocar cambios más y menos profundos en la circulación de la capital. Dar más espacio y mejorar la defensa del peatón, endurecer los protocolos anticontaminación mediante las pegatinas medioambientales de la DGT, regular los llamados Vehículos de Movilidad Urbana (VMU) o mejorar la fluidez del tráfico con normas propias para las bicicletas son algunos de los pilares.
En este caso nos centramos en éste último caso. Y es que el Consistorio ha puesto en marcha algunas medidas para permitir algunas acciones ciclistas en la carretera que hasta ahora se encontraban en una laguna legal o, directamente, estaban prohibidas. Moverse entre los coches (siempre que haya espacio suficiente) para alcanzar el espacio reservado para las mismas en un semáforo es una de ellas. Pero, sin duda, lo que más polémica ha levantado es la posibilidad de girar en rojo en los semáforos o circular en sentido contrario en algunas calles.
Giros en rojo para las bicicletas
El Ayuntamiento de Madrid ha anunciado una serie de medidas en la nueva Ordenanza de Movilidad Urbana para mejorar la fluidez del tráfico entre las que se encuentran medidas relacionadas con el giro en los cruces.
Así, en el punto número 2 del artículo 189 de la ordenanza, se expresa que “en cruces semaforizados, y siempre que exista una señalización que así lo indique, se permite a los ciclistas cruzar la línea de detención estando el semáforo en fase roja para realizar el giro a la derecha, respetando la prioridad del resto. En particular, en aquellos cruces semaforizados en los que exista paso de peatones, los ciclistas respetarán en todo momento la prioridad peatonal".
Además, en el punto anterior, se recalca que “las bicicletas en la calzada respetarán las prioridades de paso previstas en las normas de tráfico, siempre que no haya una señalización específica en contrario".
De estos dos apartados se entiende que para que una bicicleta tenga la posibilidad de girar en rojo en un semáforo, el cruce tendrá que tener una señalización expresa que lo permita, aunque no se especifica si ésta será lumínica o no (como ya sucede en algunos giros previstos con señalización de precaución para los coches en algunos semáforos).
Del mismo modo, siempre que este giro esté permitido, las bicicletas no cuentan con ningún tipo de prioridad, ni a la hora de incorporarse al nuevo carril ni tampoco a la hora de rebasar el paso de peatones, siempre y cuando alguien esté cruzando.
Circulación en sentido contrario
Nos centramos en otra de las polémicas que se ha levantado con la aprobación del nuevo proyecto. Ésta se ha generado después de que la nueva Ordenanza de Movilidad Urbana permita a las bicicletas circular en sentido contrario en aquellas calles residenciales limitadas a 20 km/h, salvo que exista una señalización específica que lo prohíba. A continuación, en el punto 3 del artículo 187 de la ordenanza, también se especifica que “los vehículos que circulen en sentido propio tendrán preferencia frente a las bicicletas que lo hagan en sentido contrario".
Estas calles son, en su mayoría, vías de los barrios más céntricos y antiguos de Madrid en los que la acera y la calzada se encuentran al mismo nivel. De hecho, otros colectivos como los peatones también se han visto respaldados en estas situaciones, ya que podrán cruzar sin necesidad de paso de cebra y con prioridad sobre los vehículos a motor, siempre que lo hagan en condiciones de seguridad.
Por último, se especifica que de existir un informe del órgano municipal que así lo permita, será posible incluir la circulación en doble sentido exclusiva para las bicicletas en “el resto de calles de sentido único de la red viaria local (…) mediante la oportuna señalización". Es decir, la circulación en sentido contrario a la marcha para las bicicletas se podrá extender a más calles si un informe lo permite, aunque se acometerán las medidas necesarias. Estaríamos hablando de la situación que ya se produce en la Calle Mayor, aunque sin la necesidad de existir un carril bici.
Medidas que han provocado algunas protestas
Estas medidas han provocado protestas de algunas asociaciones de conductores como el RACE, que asegura que estas acciones “van totalmente en contra de la formación vial necesaria que reciben los ciudadanos desde las edades más tempranas, que incluye el respeto a las normas de circulación y mantener el principio de autoridad de las señales de tráfico".
Pero el comunicado emitido no se queda ahí, también señalan que “la posibilidad de autorizar a ciclistas a circular en ambos sentidos por una vía de una sola dirección (lo que hasta ahora es circular en dirección prohibida), o a girar a la derecha en semáforos en rojo, aunque esté señalizado, suponen contradecir al Código de Circulación, poniendo de nuevo en riesgo a peatones y conductores. Para el RACE, todos los conductores deben estar sujetos a las mismas normas, independientemente del vehículo que utilicen".