Sorprendente el estudio que acaba de publicar YouGov para la Federación Europea del Transporte y Medio Ambiente (T&E), en el que los ciudadanos del Viejo Continente, y también los españoles entre ellos, serían incluso más restrictivos a la hora de prohibir los coches de combustión respecto a las normativas que aprueban sus gobiernos. Así, al menos, se desprende de las primeras conclusiones.
Si, tal y como te hemos venido informando en los últimos días, el Gobierno ya ha aprobado en el Congreso la nueva Ley de Cambio Climático y Transición Energética, en la que se anuncia la prohibición de vender turismos y vehículos comerciales ligeros nuevos de combustión interna a partir de 2040, los ciudadanos estarían en cambio mayoritariamente a favor de adelantar esas restricciones.
Según el estudio, casi tres cuartas partes de los ciudadanos de las dos grandes ciudades de España (Madrid y Barcelona) serían ya partidarios de que solo se vendan coches eléctricos, y por lo tanto no diésel o gasolina, a partir de 2030, 10 años antes de lo anunciado por el Gobierno.

Según los datos de YouGov, recogidos a través de una encuesta online y que se ha llevado a cabo hasta en 15 ciudades de Europa, un 72 por ciento de los madrileños y un 74 por ciento de los barceloneses serían ya partidarios de que no se vendan coches diésel o gasolina en menos de 10 años, desde 2030. Por el contrario, obviamente, solo el 21 por ciento de los ciudadanos de Madrid y el 20 por ciento de los de Barcelona se opondrían a esta prohibición.
Esta notable aprobación a los restricciones solo sería superada en Europa por Roma (con un 77%) y por Milán (con un 73% de opiniones favorables a la prohibición). La media en todos los países es de un 64 por ciento, siendo Berlín (51%), Amberes (51%), Hamburgo (52%) y Lyon (53%) las ciudades donde los habitantes están menos a favor de las restricciones comerciales.
Isabell Büschel, directora de T&E en España, justifica esta tendencia asegurando que el apoyo a las prohibiciones ha sido mayor entre los habitantes de las ciudades que han sufrido en mayor medida la COVID-19, quizá al estar ahora más concienciados en términos de salud pública. “Los habitantes de las ciudades son los más expuestos a los niveles tóxicos de contaminación atmosférica, y no quieren que se vendan motores de combustión interna durante más tiempo del necesario”, ha declarado Büschel.
In all 15 cities, majority support #ICEphaseout after 2030
— Transport & Environment (@transenv) April 12, 2021
🇫🇷 Paris 61% Lyon 53%
🇩🇪 Hamburg 52% Berlin 51%
🇮🇹 Rome 77% Milan 73%
🇪🇸 Barcelona 74% Madrid 72%
🇬🇧 London 65% Birmingham 67%
🇭🇺 Budapest 72%
🇵🇱 Warsaw 60% Krakow 60%
🇧🇪 Antwerp 51% Brussels 56%https://t.co/ewIe0GtRBu