El 81,5% de los vehículos aprueban la ITV a la primera, cifras que aportan desde el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo. No es un proceder demasiado complicado, sin embargo es clave tanto por el bien del vehículo, como por nuestra seguridad.
Oculto
Hay defectos en nuestro coche que no se ven a simple vista y que solo pueden ser detectado con maquinaria especial como la que tienen en la inspección de las estaciones de ITV, donde cuentan con herramientas adecuadas. Sin embargo, hay elementos del coche que podemos comprobar en casa de una manera sencilla.
La Asociación Española de Entidades Colaboradoras de la Administración en la Inspección Técnica de Vehículos, la AECA-ITV cuenta con una lista de los elementos que se recomienda revisar antes de ir a tu revisión de la ITV para que podamos circular con el vehículo de forma segura y no suspendamos la inspección.
Los neumáticos
Son elementos que están en continuo contacto con la carretera. Estos deben estar perfectamente inflados, entre las cifras mínimas y máximas que da la marca (normalmente puestas en la puerta del conductor) y en buen estado en cuanto a la profundidad del dibujo, que no tenga desgastes irregulares, cortes o ampollas.
Los frenos
Seguramente después de los neumáticos sean el elemento más clave de nuestro coche. Deben estar en perfecto estado tanto las pastillas, como los discos o tambores, como el circuito y que el nivel del líquido de frenos esté como debe estar. Hay que mirar si las pastillas sufren de mucho desgaste, que en caso de ser así, quiere decir que podría haber una fuga en el circuito o simplemente que los tenemos gastados del uso.

El sistema post tratamiento de gases
La comprobación de que no haya fugas en el escape, al igual que el color del humo son claves para saber si nuestro coche está en condiciones óptimas para pasar la inspección. Antes de ir a dicha revisión, deberemos rodar el coche durante al menos media hora para que el sistema de escape esté caliente y así se limpie la carbonilla.
El aceite
Para comprobarlo, deberemos tener el vehículo frío y en una superficie plana. La varilla limpia, se introduce y se repite la operación de cara a comprobar el nivel de aceite que tiene el motor de nuestro coche. La marca debe quedar siempre entre el mínimo y el máximo. Si no está entre esos valores, debemos corregirlo ya que esto puede significar que hay una avería en el motor como el “chorreo” de los inyectores o el desgaste de segmentos/asientos de válvulas.
Los limpiaparabrisas
El depósito debe estar completamente lleno de agua o, en su preferencia de líquido específico limpiador. A su vez, deberemos echarle un ojo al estado de las escobillas de los limpiaparabrisas, tanto delanteros como traseros, en caso de tener. Si estos tienen grietas o pérdida de elasticidad, ensuciando más de lo que limpian cada vez que los usamos, deberemos sustituirlos, algo que, además se puede hacer también en casa.

La batería
De la batería de arranque depende el correcto arranque del coche. Debemos comprobarla con su fijación al bastidor, la ausencia de fugas de electrolito, el estado de los bornes y las conexiones. Que todo ello esté en buen estado es clave para poder mover nuestro vehículo.
Las luces
Estas deben funcionar a la perfección. Desde las luces de freno, hasta intermitentes, faros y pilotos deben estar en buen estado para garantizar una buena visibilidad, tanto para ver como para hacerse ver cuando las condiciones de luz no son óptimas. A su vez debemos cuidar el alineado de las luces de los faros.

La carrocería
Se trata de la capa exterior del vehículo, lo que le permite dar forma y utilidad al chasis y a la plataforma. Hay que prestar especial atención a los efectos de oxidación o corrosión, roturas y a posibles defectos de las fijaciones de los elementos del exterior del coche. Se debe revisar a su vez el estado de los cristales, de los espejos y el correcto funcionamiento de las puertas.
El interior
El acondicionamiento del habitáculo es clave. Empezando por los cinturones de seguridad, que son de los elementos más importantes de seguridad del coche, deberemos controlar tanto su estado, que no haya cortes ni desgastes y su funcionamiento, ver si la hebilla ancla bien y se recoge sin problemas y el estado de los asientos, que debe ser el correcto. A su vez, no está de más comprobar que los testigos luminosos funcionan bien reflejando el perfecto funcionamiento de los sistemas.

El papeleo
Para terminar, asegúrate de tener el seguro obligatorio en vigor y a pesar de no ser obligatorio, se recomienda llevar el original de la Tarjeta de Inspección Técnica y el permiso de circulación del vehículo.