La Comisión Europea ha publicado ya las primeras cifras de estimación de muertes en accidente de tráfico en las carreteras de la UE en todo el año 2020. De momento son provisionales pero, aunque cualquier fallecimiento sin duda supone todo un drama familiar, y el número sigue siendo muy elevado, España mejora al menos su posición en la foto comunitaria de este importante problema social.
Según por tanto los primeros datos publicados, y que recoge directamente ya la DGT, España acumula una tasa de 29 fallecimientos por millón de habitantes, colocándose con este dato como el cuarto país en toda la Unión Europea con menor tasa de mortalidad por siniestro de tráfico. Sólo se situaría por detrás de Suecia (18), Malta (21) y Dinamarca (27).
Según informa y presume la DGT, España se sitúa así por primera vez en su historia por delante de países como Holanda (31), Alemania (33) o Francia (39), considerados siempre referentes en seguridad vial. En total, en toda la UE, hasta 18.000 personas fallecieron en las carreteras en 2020, lo que supone un descenso del 17% en comparación con 2019.

Eso sí, los datos no son todo lo buenos que cabría esperar si tenemos en cuenta que en 2020 ha habido una notable reducción del tráfico y de la movilidad en todos los países a consecuencia de la pandemia del coronavirus y de los confinamientos y restricciones impuestos por todos los gobiernos. La Comisión Europea, eso sí, asegura que ha tenido impacto pero que no es medible la proporción para extraer más conclusiones.
Según los datos del informe, en 18 estados miembros hubo menos fallecidos en accidentes en 2020, pero con una reducción muy desigual entre países. Con más de un 20 por ciento de descenso se posicionan España, Bélgica, Dinamarca, Francia, Croacia, Italia, Hungría, Malta, Eslovenia y Bulgaria. Sin embargo, en Estonia, Irlanda, Letonia, Luxemburgo y Finlandia vieron incluso cómo aumentaron el número de víctimas en siniestros viales.
Pere Navarro, director de la DGT, asegura que el reto ahora es “consolidar esa tendencia. Hemos tomado medidas normativas que necesitan un tiempo para consolidarse y para comprobar la efectividad de las mismas”.
El objetivo de reducción para la década, no conseguido
Otra de las notas negativas llega en la comparativa de datos reales y estimados. Según la Comisión Europea, en la década 2010-2020 el número de muertes en carretera se redujo en un 36 por ciento, lejos del objetivo planteado del 50% que habían fijado el organismo y los estados. Sólo Grecia superó ese objetivo con un 54%: España, por ejemplo, se quedó en un 44 por ciento.