No todo es lo que parece. Y por eso, a pesar de lo que podamos llegar a pensar, un coche grande no va a ser necesariamente el más seguro para sus pasajeros en caso de choque. Las encargadas de desmontar este mito son estas pruebas de choque que ha llevado a cabo el Insurance Institute for Highway Safety (conocido por sus siglas IIHS o Instituto de Seguros para la Seguridad en las Carreteras), el organismo equivalente al EuroNCAP en Estados Unidos. Y para llevarlas a cabo el IIHS ha elegido cuatro de las pick-up grandes más populares en el mercado estadounidense.
Se trata del Ford F-150, RAM 1500, Toyota Tundra y Chevrolet Silverado 1500, cuatro pick-up que, si bien ofrecen una excelente protección en el choque lateral, se quedan cortas cuando se trata de proteger a los pasajeros en el asiento trasero.
Riesgo de lesiones para los ocupantes de las plazas traseras
Así, estos cuatro modelos obtienen buenas calificaciones en la prueba de choque lateral, recientemente actualizada por el IIHS. Sin embargo, en la prueba de choque frontal, que también ha sido actualizada y que ahora pone más el foco en la seguridad en el asiento trasero, solo el Toyota Tundra se salva, mientras que el resto obtienen una pobre calificación.

Este organismo norteamericano actualizó su prueba de choque frontal el año pasado después de que una investigación demostrara que en los vehículos más nuevos el riesgo de lesiones mortales son ahora mayores para los ocupantes con cinturón de seguridad en la segunda fila de asientos. Esto no significa que esta fila se haya vuelto menos segura, lo que ocurre es que las plazas delanteras protegen ahora mejor a sus ocupantes gracias a los airbags mejorados y a los asientos avanzados.
Así son las nuevas pruebas de choque en EE.UU.
El nuevo protocolo de seguridad del IIHS utiliza un segundo dummy en la segunda fila, detrás del asiento del conductor. Este muñeco tiene el tamaño de una mujer de pequeña estatura o de un niño de 12 años. Los investigadores del IIHS también han desarrollado nuevas métricas que se centran en las lesiones que se observan con mayor frecuencia en los pasajeros del asiento trasero.
Para que un vehículo obtenga una buena calificación, no puede haber un riesgo excesivo de sufrir lesiones en la cabeza, el cuello, el pecho o el muslo. Además, el dummy debe permanecer en la posición correcta durante el choque, sin deslizarse hacia delante por debajo del cinturón de seguridad (el temido efecto submarino), lo que aumenta el riesgo de lesiones abdominales. Además, la cabeza debe permanecer a una distancia segura del respaldo del asiento delantero y del resto del interior del vehículo, y el cinturón debe permanecer en el hombro, donde es más eficaz. Para ello se utiliza un sensor de presión en el torso del muñeco trasero para comprobar la posición del cinturón durante el choque.

Igualmente, la estructura del habitáculo debe preservar un espacio de supervivencia adecuado para el conductor y las mediciones tomadas por el dummy del conductor no deberían mostrar un riesgo excesivo de lesiones.
Ningún coche se salva del efecto submarino
Los cuatro modelos ofrecieron una buena protección en el asiento delantero. Pero los sistemas de retención en la parte trasera fueron inadecuados y en todos los casos el dummy sufrió el tan temido efecto submarino.
En el caso del Ford F-150 es muy probable sufrir lesiones en el pecho, en la cabeza o en el cuello, mientras que en el Ram 1500 el riesgo de esas lesiones es algo menor. En el Toyota Tundra el riesgo de lesiones en el pecho también es demasiado alto debido a la mala colocación del cinturón, pero el riesgo de lesiones en la cabeza o el cuello es solo ligeramente elevado.
La actualización de la prueba lateral se introdujo para abordar los choques a alta velocidad. Y al igual que antes, utiliza dos dummys, uno para el conductor y otro para el pasajero trasero. Sin embargo, utiliza una barrera más pesada que viaja a mayor velocidad para simular el vehículo que choca.
En esta prueba, tanto el F-150, como el Ram 1500 y el Tundra brindan una protección sólida delante y detrás, aunque el ocupante del F-150 se vio ligeramente comprometido por el impacto. El Silverado obtiene una calificación de aceptable.