Dueños de desguaces, propietarios y trabajadores de talleres mecánicos, responsables de dos gestorías y hasta un empresario de una chatarrería. En total, 22 personas han sido detenidas en una importante operación efectuada por la Guardia Civil de Tráfico contra el robo y la venta ilegal de piezas de coches. Tras una investigación que ha durado casi un año, se acusa ahora a la banda de haber desguazado más de 800 coches en Madrid durante los últimos 9 meses.
El “modus operandi" de esta importante red criminal era muy sencillo. Los arrestados recibían encargos y, posteriormente, localizaban los coches que les interesaban. Entonces, y a través de unas llaves maestras obtenidas desde Bulgaria y Rusia, denominadas decoder, abrían los vehículos, que arrancaban también gracias a máquinas de diagnosis. Actuaban de noche y, fundamentalmente, en localizaciones de la periferia de Madrid.
Así, en muy poco tiempo, los vehículos eran robados para, posteriormente y en muy pocas horas, desmontarlos y agrupar sus piezas. Éstas eran luego enviadas por mensajería a diferentes talleres, desguaces, chatarrerías, compraventas y otros centros autorizados del sector del automóvil.
Algunos de estos puntos de venta, que no participaban en los robos, ni siquiera sabían que estas piezas eran ilegales, ya que la organización también falseaba su documentación a través de las gestorías participantes. Los clientes tampoco eran conscientes, según ha dictaminado la Guardia Civil, de que las piezas eran robadas.
La operación aún sigue abierta, ya que todavía se estudia y analiza las miles de piezas de coches recuperadas durante la investigación. Entre los coches que más sustraía la organización figuran vehículos de Volkswagen, BMW o Mercedes-Benz. Los detenidos, la mayoría de nacionalidad española, aunque también hay algún polaco, argentino, rumano y colombiano, tienen edades de entre 24 y 70 años, y su cabecilla, de 40 años, cuenta con importantes antecedentes policiales, incluso relacionado con algún homicidio.
Los detenidos, según informa la Guardia Civil, van a ser ahora acusados de pertenencia a organización criminal, de robo continuado de vehículos, falsedad documental, estafa y receptación. La Agrupación de Tráfico sospecha que operaban en España desde el año 2014.