Uno de los principales problemas que tienen los coches eléctricos es su precio, generalmente más elevado que sus versiones equivalentes de gasolina o diésel. También, y según un estudio realizado en Francia, muchos conductores se arrepienten de comprar un coche eléctrico por el precio de la recarga.
Pero otra de las preocupaciones tiene que ver con el posible coste de reparación tras un accidente o un golpe. Un factor que podría ahuyentar a muchos compradores. Sin embargo, un estudio podría aliviar parte de esa preocupación.
Casi todos los coches nuevos cuentan hoy con tecnología avanzada, compuesta por componentes como sensores lidar, sensores de radar y cámaras, y que además suele estar contenida en los principales paneles de la carrocería. Además, los vehículos eléctricos tienen paquetes de baterías y motores eléctricos que pueden elevar la factura en el taller en caso de tener que reparar cualquier golpe o pequeño accidente.
Cuesta lo mismo reparar un coche de gasolina que uno eléctrico
Hasta ahora, varios informes parecían indicar que reparar un vehículo eléctrico costaba mucho más que un coche de combustión. Sin embargo, y según los datos de una empresa de software para talleres de reparación, los costes de reparación son casi idénticos entre un vehículo de gasolina y uno eléctrico, siempre y cuando no se trata de un Tesla.

Mitchell, la empresa de software en cuestión, encontró una serie de detalles interesantes que ahora han sido publicados por Autonews. Por un lado, el coste medio de reparación de un vehículo de combustión para todos los clientes de Mitchell fue de 4.205 dólares (poco más de 4.000 €). Esta cifra es sólo 269 dólares (254 €) menos que la de un vehículo eléctrico, que no sea un Tesla, cuyo coste medio de reparación es de 4.474 dólares (4.226 €). Es decir, una diferencia de sólo el seis por ciento.
Pero Tesla es la excepción
Curiosamente, y según las estadísticas, aquellos que tienen un Tesla tendrán que pagar una factura de reparación mayor. Los mismos datos indican que los propietarios de un Tesla pagan de media 5.552 dólares (5.244 €), aproximadamente un 27 por ciento más, por reparación. Es decir, nuevamente la tecnología asociada a estos vehículos es la que tiene unas tarifas de reparación más elevadas.
Según uno de los portavoces de la empresa Mitchell, "Estos vehículos están a la vanguardia de toda la tecnología de seguridad y digital del automóvil conectado y todo eso desempeñará un papel importante cuando estos vehículos se vean involucrados en una colisión".
Además, hay otros factores que podrían estar impulsando el coste de las reparaciones de los coches eléctricos. En primer lugar, suelen ser más nuevos, lo que significa que las opciones en el mercado de accesorios no son tan abundantes, lo que aumenta el coste. En segundo lugar, el coste total de los vehículos eléctricos está bajando, lo que significa que algunos que podrían haber sido reparados se amortizan, minimizando el posible coste de reparación informado.