El despacho de abogados Guzmán & Cubero acaba de informar a través de un completo hilo de twittter (que puedes ver más abajo) de una nueva sentencia que, sin duda, puede sentar jurisprudencia respecto a una actitud ilegal, además de muy poco cívica: aparcar un coche en una plaza de discapacitados sin autorización o, incluso peor, con una tarjeta de identificación falsa, tal y como ha ocurrido en esta nueva sentencia.
Si ayer precisamente os contábamos por medio de SocialDrive que la policía aparcaba su coche en una plaza de discapacitados para colocar un radar y multar a coches, hoy precisamente hemos conocido que la Audiencia de Alicante ha confirmado una sentencia de 1 año de prisión y hasta 1.620 euros de multa a un hombre que estacionó su vehículo en la localidad de Denia en una plaza reservada a discapacitados usando una tarjeta de aparcamiento falsificada.
En concreto, ha sido el Juzgado de lo Penal nº1 de Benidorm quien ha dictado esta sentencia al considerar al denunciado como autor de un delito de falsedad en documento oficial. La tarjeta que introdujo en el coche era en realidad una fotocopia a color de una original emitida a nombre de su ex cuñado.
La Audiencia de Alicante confirma un año de prisión para un hombre que aparcó en una plaza de discapacitados con una tarjeta falsahttps://t.co/NqDuHtmyFW pic.twitter.com/rBbgu5nBen
— Abogados Guzmán & Cubero (@AboGuzmanCubero) September 21, 2020
En el recurso de apelación, según informa Guzmán & Cubero, el hombre condenado ahora alegó que el documento no era falso, sino que en realidad existía un original que coincidía con el contenido de su tarjeta, perteneciente al hermano de su ex mujer. El suegro, al parecer, era quien había hecho fotocopias para que las llevasen todos los coches de la familia y él había olvidado retirarla.
La Audiencia Provincial consideró esa excusa como no contrastada por ninguna prueba, asegurando en cualquier caso que su ex cuñado, titular del permiso, además hacía ya tres años que no vivía en España. En todo caso, la sentencia asegura que las tarjetas de aparcamiento para personas con discapacidad se conceden por parte de los ayuntamientos y con título personal e intransferible: solo puede emplearse por la persona titular cuando conduzca un vehículo o sea transportada en él.
Así, un hecho como el ocurrido en Denia supone una doble infracción: aparcar donde está prohibido y falsear un documento, alterando o simulando ser uno oficial. Según recoge así el artículo 392.1 del Código Penal, este último tipo de delito está castigado con pena de prisión de 6 meses a 3 años y con una multa de entre 6 y 12 meses.
