Salvo por una irregularidad técnica (que no afectaba a las prestaciones de los C-Elysee WTCC) que envió a los dos mejores Citroën al fondo de la parrilla tras la calificación, la marca francesa volvió a dejar su impronta en una nueva reunión del Campeonato del Mundo de Turismos, esta vez en el trazado “de casa”, Paul Ricard. Yvan Muller se impuso en la primera carrera partiendo desde la pole position, mientras que José María “Pechito” López demostró que su liderato provisional no es fruto de la casualidad en la segunda carrera, donde logró la victoria… saliendo desde el último lugar de la parrilla. Ambos se perfilan como dos grandes aspirantes a pelear por el título, siempre con el permiso de un Sébastien Loeb también muy brillante. Consiguió la pole (pese a que su tiempo fue anulado tras las verificaciones), y remontó desde el penúltimo hasta el segundo puesto en la primera carrera, sufriendo algo más con un par de encontronazos en la segunda, donde “solo” consiguió ser sexto. La marcha triunfal de Citroën y sus pilotos en el campeonato es ya una cosa cantada…
CALIFICACIÓN
Si en la primera reunión los Citroën marcaron la pauta ya desde la calificación, en esta ocasión no iba a ser menos. Curiosamente, en Paul Ricard sucedió lo mismo que en Marrakech, pero con diferentes protagonistas. Si en aquella ocasión Yvan Muller fue penalizado por cortar en exceso en una chicane, en esta ocasión el francés sería el principal beneficiado de otra penalización sufrida por su equipo, aunque en esta ocasión la sufrida por sus compañeros Sébastien Loeb y José María “Pechito” López. Tanto es así que el multicampeón de rallyes apenas podía celebrar su primera pole position en el WTCC, ya que en las verificaciones posteriores a la tanda, tanto su Citroën C-Elysee como el del autor de la segunda mejor vuelta de la sesión, López, fallaban al accionar el dispositivo que debía cortar automáticamente el suministro de combustible ante un accidente u otro tipo de emergencia, por lo que ambos eran desposeídos de sus tiempos y enviados al fondo de la parrilla. En ese contexto, Yvan Muller, autor de la tercera mejor vuelta con el tercer Citroën oficial, pasaba a ocupar la pole position en parrilla, acompañado en primera fila por Gabriele Tarquini (Honda Civic), que encajaba casi 1 segundo con el francés y 1.2 con respecto al registro de Loeb. Hugo Valente (Chevrolet Cruze) le daba otra alegría al equipo español Campos situándose tercero en la parrilla, justo por delante del segundo mejor Honda en la sesión, el de Norbert Michelisz.
CARRERA 1
Con la diferencia en prestaciones a favor de su Citroën C-Elysee, no era difícil pensar que Yvan Muller no tendría grandes problemas para dominar la primera de las dos carreras del programa. Sin embargo, el alsaciano tenía algunas dificultades en la salida sobre el húmedo asfalto de la pista y era superado en la arrancada por el Honda de Tarquini y por el de Michelisz, también muy atento en el inicio de la carrera. Sin embargo, Muller conseguía adelantar a Michelisz antes de concluir el primer giro, lanzándose como un poseso a por Tarquini, al que desbancaba del liderato en la vuelta tres, debiendo aplicarse algo más para neutralizar la ventaja inicial que se había cobrado el italiano. Los dos pilotos de Honda eran conscientes de que el gran empuje de Muller iba a ser muy difícil de contener, aunque tal vez no lo eran tanto de la furiosa remontada también de Loeb, que en la vuelta cuatro ya era sexto… ¡y quedaban doce! Dos vueltas más tarde, Michelisz era el primero en sufrir el zarpazo del ex campeón de rallyes, que firmaba vuelta rápida tras vuelta rápida en su asalto al podio. Sin embargo, lejos de conformarse con el tercer escalón, fijaba en su punto de mira a Tarquini, al que comenzaba a acosar a falta de cuatro vueltas para el final, con gran resistencia por parte del veterano piloto de Honda. Sin embargo, a falta de dos vueltas para la caída de la bandera a cuadros, el italiano tenía que rendirse ante el apabullante poderío de la máquina francesa, que literalmente le dejaba clavado y le relegaba al tercer y definitivo puesto. Tras él se clasificaba el tercer Citroën, el de López, que perdía mucho tiempo en una ligera salida en los primeros compases de la carrera, pese a lo que conseguía superar al pelotón de Rob Huff (Lada), Hugo Valente (Chevrolet) y Norbert Michelisz (Honda), cuya pelea por el quinto puesto se prolongó hasta casi el final, entrando en meta por ese orden.
Clasificación carrera 1 (16 vueltas)
1º Yvan Muller (Citroën C-Elysee WTCC), 27:58.347
2º Sébastien Loeb (Citroën C-Elysee WTCC), 12.727
3º Gabriele Tarquini (Honda Civic WTCC), 15.026
4º José María López (Citroën C-Elysee WTCC), 18.663
5º Rob Huff (Lada Granta WTCC), 31.393
Vuelta rápida: Sébastien Loeb (Citroën C-Elysee WTCC), 1:44.389
CARRERA 2
Por si la solvencia del Citroën C-Elysee no hubiera quedado suficientemente demostrada con la victoria de Muller y la remontada de Loeb en la primera carrera, José María López se encargó de demostrar hasta qué punto la máquina francesa está por encima de sus rivales en la segunda manga. Partiendo desde la última posición en la parrilla de nuevo por la penalización de la calificación, el piloto argentino emprendió un viaje frenético hasta las posiciones de vanguardia desde la misma salida. Tanto, que al final de la primera vuelta ya había ganado diez posiciciones y había conseguido superar incluso a su compañero Muller, que partía décimo con la mitad de la parrilla invertida y que se veía involucrado en un incidente en el que Gianni Morbidelli se marcaba un trompo y le retrasaba. Las cosas se le ponían aún más de cara a López en la vuelta cinco, cuando el director de carrera enviaba el coche de seguridad a la pista para recolocar una columna de neumáticos que protegía el vértice de una curva y que había sido golpeada por Sébastien Loeb y enviada a la mitad del trazado. A esas alturas, el argentino ya había alcanzado la segunda plaza, tras el portugués Tiago Monteiro (Honda), que veía deshecha su ventaja de cerca de 5” de golpe y porrazo por la salida del safety. Monteiro lo daba todo por perdido en la reanudación, aunque esta no duraba más que un puñado de segundos, ya que en este caso una melé en la cola del pelotón devolvía al coche de seguridad a la pista, esta vez para quedarse hasta la vuelta nueve. Tras la nueva salida, Monteiro se aplicaba a fondo para sujetar el empuje de López, algo que conseguía solo durante un giro, ya que el argentino le desbancaba de la cabeza en la vuelta diez, beneficiándose de la caballerosidad de Yvan Muller, que rodando tras López podía haberse metido en la pelea por el liderato en ese momento, pero decidía dejar que su compañero ejecutara el adelantamiento para hacer él lo propio a continuación e intentar luego dar caza al argentino. No lo conseguiría, y ambos cruzaban la meta seguidos de Monteiro, del compañero de éste en Honda-Castrol, Gabriele Tarquini, y del marroquí Mehdi Bennani (Honda). Sébastien Loeb tenía una carrera mucho más “movida” en esta ocasión y, tras un primer encontronazo con su compañero Muller en los primeros compases de la carrera, sufría un segundo toque con el Chevrolet Cruze de Dusan Borkovic (Campos), que cortaba también su remontada. Ésta finalizaba en el sexto puesto.
Clasificación carrera 2 (18 vueltas)
1º José María López (Citroën C-Elysee WTCC), 30:24.551
2º Yvan Muller (Citroën C-Elysee WTCC) 1.886
3º Tiago Monteiro (Honda Civic WTCC), 7.994
4º Gabriele Tarquini (Honda Civic WTCC), 8.459
5º Mehdi Bennani (Honda Civic WTCC), 17.407
Vuelta rápida: José María López (Citroën C-Elysee WTCC), 1:31.468
Campeonato
1º José María López, 85 puntos
2º Sébastien Loeb, 73 puntos
3º Yvan Muller, 65 puntos
4º Hugo Valente, 31 puntos
5º Gabriele Tarquini, 31 puntos
