Se ha hablado mucho de un Skoda todocamino de mayor tamaño que el Yeti, y por fin tenemos más información. Aunque algunos medios lo han bautizado Snowman, su nombre interno es A-Plus SUV, se presentará en el Salón de París de 2016 y llegará a los concesionarios españoles en 2017. Por tamaño se englobará dentro del segmento D, con una longitud de carrocería de aproximadamente 4,64 metros. Es decir, será semejante a un Audi Q5, un BMW X3 o un Nissan X-Trail, y contará con capacidad para 7 pasajeros. También hemos podido saber que empleará la plataforma modular MQB, por lo que tendrá muchas similitudes a nivel tecnológico y en lo que respecta a motorizaciones con el nuevo Volkswagen Tiguan.
Del diseño del Skoda A-Plus SUV cabe destacar un frontal con mucha personalidad gracias a unos grupos ópticos achatados que recuerdan al Range Rover Evoque, con funciones divididas, tecnología Led y separados horizontalmente por el paragolpes para dejar un pequeño faro inferior cuadrado. Los pasos de rueda son trapezoidales, similares a los del anterior Tiguan y no demasiado abultados para evitar una imagen demasiado agresiva, manteniendo así cierta discreción acorde a la marca. En cuanto a la trasera, imagínate una especie de Skoda Vision C, muy minimalista, pero con la luna y el portón en vertical.
A partir del Skoda A-Plus SUV surgirá un derivado de 5 plazas y aspecto más deportivo, casi coupé, siguiendo la moda que impuso el BMW X6 en su momento. Se diferenciará por leves cambios en la parrilla, más elementos cromados y, sobre todo, una línea de techo descendente acabada en un prominente deflector aerodinámico. Viendo el concepto 20V20 de Seat te puedes hacer una idea muy aproximada de sus proporciones, así como de las formas de los paneles de la carrocería en la zona trasera del coche, inclinación del portón y silueta que tendrán los pilotos. En principio estará destinado al mercado chino, donde el crecimiento de modelos convencionales se ha estabilizado y se espera una mayor demanda para automóviles de tipo SUV.
Nuevo Yeti
El otro gran protagonista será la nueva generación del Skoda Yeti, que llegará algo más tarde, en 2017, y guardará una gran similitud estética con el A-Plus SUV, pero a una escala ligeramente reducida. También basado en la plataforma MQB, crece en tamaño respecto al actual Skoda Yeti, algo que le vendrá muy bien para aumentar su practicidad y capacidad interior. Un nervio lateral muy marcado aportará dinamismo a su diseño, así como una menor superficie acristalada en los laterales logra mayor rotundidad y sensación de robustez, ya que las ventanillas van reduciendo su tamaño a medida que avanzan hacia la zaga. Igual que en el Skoda A-Plus SUV, los grupos ópticos se dividen en dos partes.
Y por debajo, concretamente en el segmento B, también habrá un nuevo integrante de la gama SUV de Skoda, un modelo de acceso, previsto para 2019, que adoptará el lenguaje de diseño del Skoda Vision C, con unos grupos ópticos delanteros muy similares. Detrás, la tercera luz de freno estará formada por una franja horizontal que transcurre a lo ancho de casi toda la luna posterior, al estilo de un Audi A7.
En definitiva, importante ofensiva al segmento SUV por parte de Skoda, que da un salto adelante muy importante en diseño, pero todo hace pensar que no abandonará sus tradicionales valores de marca en lo que respecta a habitabilidad, practicidad y relación calidad/precio.