La vacuna contra el Covid-19 se ha convertido, sin duda, en el antídoto vital en la lucha contra el coronavirus y en el elemento más deseado por la mayoría de la población. La escasez de dosis suficientes para inmunizar al conjunto de la población está generando conflictos entre distintos países con las empresas farmacéuticas, así como entre distintos sectores de la población que permanecen de momento a la espera de incluirse en el calendario. Entre ellos, los transportistas profesionales.
Por ello, la Patronal del sector de transporte internacional por Carretera (ASTIC) acaba de solicitar por carta al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana que los conductores profesionales sean “incluidos con urgencia entre los colectivos preferentes de vacunación de España, por la labor vital que realizan para la ciudadanía y para hacer viable el desarrollo económico del país y mantener la cohesión territorial”.
ASTIC considera que solo de esta forma puede garantizarse al 100% la continuidad de la actividad laboral de los conductores profesionales, “trabajadores en primera línea como lo son también las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y los profesionales sanitarios”.

Para Marcos Basante, presidente de ASTIC, “no podemos permitirnos el lujo y el error como sociedad de prescindir de la función esencial que desempeñan nuestros transportistas, del mismo modo que no podríamos continuar sin la salvaguardia y asistencia de nuestra Policía, Guardia Civil o del personal sanitario”.
En la carta dirigida al propio ministro José Luis Ábalos, la patronal del sector de transporte internacional por Carretera reivindica el papel que tuvo el transporte profesional en las semanas más duras del confinamiento al inicio de la crisis del Covid-19: “el transporte de mercancías fue capaz de llenar de contenido el lema #EnRutaPorTi para millones de personas en nuestro país y en toda Europa”.
Por todo ello, ASTIC solicita formalmente que el Gobierno impulse que los conductores profesionales reciban la vacuna lo antes posible por el bien de la sociedad en su conjunto, no porque ellos sean especialmente susceptibles a ser contagiados o a contagiar, "sino para que sigan cumpliendo con su misión principal sobre el asfalto: conectar los centros de producción con la demanda de mercancías de la sociedad”. Desde luego, la petición parece justa y tiene sentido.
