Como no puede ser de otra manera, la mejora de comportamiento en asfalto ha traído consigo el empeoramiento de la capacidad campera. Menos acusada en la versión corta, esta sí da la talla de manera satisfactoria en un uso intensivo en campo. El nuevo sistema de control de tracción sustituye al bloqueo de diferencial trasero, y para los conductores menos experimentados es toda una delicia, ya que de lo único que tiene que preocuparse el conductor es de guiar la dirección y acelerar. La electrónica hará el resto.Otro detalle que tendrán que tener en cuenta los propietarios más marchosos del nuevo Land Cruiser es que los nuevos estribos peligran bastante en trialeras. Las faldillas delanteras se encuentran sujetas por grapas de plástico, y es fácil arrancarlas. Si tenemos suerte y nuestra unidad viene con neumáticos Michelin en lugar de Bridgestone o Dunlop, tendremos unas cubiertas un poco mejor adaptadas al uso campero, al contar con un dibujo mejor.Interior: Difícilmente es factible establecer un vínculo entre este Land Cruiser y el anterior. La comodidad a bordo está garantizada por infinidad de detalles. El paso a las plazas traseras es el punto a mejorar.
Carretera: La inclinación de la balanza hacia el asfalto se deja notar tanto en el motor como en el bastidor. El propulsor se encuentra más a gusto en la zona alta del cuentarrevoluciones.
Pista: El nuevo sistema de transmisión funciona a la perfección, suavizando bastante la tendencia a «irse de morro» en las curvas. La suspensión aún puede mejorar.
Zona activa: Para conductores con poca experiencia el nuevo Land Cruiser es mejor que el anterior ya que este trabaja por su cuenta para sacarnos de los problemas. La pérdida de bajos se deja notar mucho.
Motor perezoso: El brío a bajas vueltas de los antiguos motores de ocho válvulas ha desaparecido, al contar ahora con mejor respuesta en alta
Acceso a plazas traseras:Además de un poco justo únicamente se puede realizar por el asiento del acompañante, el cual carece de memoria de posición
Tacto cambio/motor: En conducción alegre es imposible realizar cambios suaves y rápidos. La sensación es similar a la de «tirar de embrague» para subir de vueltas
Economía: La afirmación hasta ahora correcta de que todo lo que anda gasta queda desmentida con el nuevo Land Cruiser con uos consumos siempre bajos
Prestaciones asfalto: Los ingenieros nipones han fabricado el Land Cruiser que el público demandaba. Independientemente de su capacidad campera, las prestaciones en asfalto se encuentran a un alto nivel respecto al antecesor
Moderno interior: El aspecto más criticable del anterior Land Cruiser es ahora uno de los más elogiables. Tanto por calidad de materiales como por acabados el nuevo interior es ahora otro mundo
Quinta rueda: Las mismas sensaciones que nos aportó la versión de carrocería larga se repiten en la versión de 3 puertas. Las cifras de prestaciones son ligeramente mejores que en la versión larga, sobre todo en lo que a recuperaciones se refiere. Aunque hay que dejar claro que con una diferencia de peso real de tan solo 99 kilos, este resultado es de esperar. Lo que sí ha sido más curioso es que, en el apartado de frenos, la versión larga, con algo más de peso, ha mejorado ligeramente al corto. No obstante, los frenos funcionan aceptablemente bien, aunque la resistencia a la fatiga no es su fuerte. La tendencia a no bajar de vueltas cuando pisamos el embrague para subir a una marcha superior, resta agrado a practicar una conducción alegre, ya que sin darnos cuenta estamos realizando patinamientos de embrague no deseados.