La quinta generación del Subaru Impreza se desveló en marzo de 2016 en el marco del Salón de Nueva York, pero no ha sido hasta abril de 2018 cuando Subaru ha arrancado su comercialización en nuestro país y con una gama muy limitada; con una sola opción mecánica y dos acabados. La respuesta a ello la encontramos en su hermano mellizo XV, que no es más que la versión crossover del Impreza, en la que los responsables de la marca japonesa en España han centrado todos sus esfuerzos durante la fase de lanzamiento e inicio de comercialización.
Como el XV, la nueva generación del Subaru Impreza recurre a la moderna plataforma modular SGP, que gracias a una rigidez muy superior ofrece un gran comportamiento dinámico sin recurrir a una amortiguación excesivamente firme. No en vano alcanza un gran compromiso en este apartado. Aporta confort y una calidad de bacheo muy superior a la de la anterior generación mientras contiene con eficacia los balanceos en curva.
PRESTACIONES | Subaru Impreza 1.6i-S CVT Lineartronic Executive AWD |
Acel. 0-100 km/h | 13,36 s |
Acel. 0-1000 m | 34,90 s |
Sonoridad 120 km/h | 72 dBA |
Sonoridad 140 km/h | 74 dBA |
Frenada desde 140 km/h | 73 m |
Peso en báscula | 1.389 kg |
La dirección —electromecánica— se siente suficientemente rápida y precisa, mientras transmite un buen nivel de información, aunque a algunos no les convenza en su punto central a alta velocidad. Los frenos aportan buen tacto a su pedal y se encuentran en la media entre sus rivales por distancias de detención, si bien no sobresalen por resistencia. Su tracción total Symmetrical AWD aporta una excelente motricidad, a la que también ayuda tanto la plana respuesta de su mecánica como el excesivo resbalamiento y lenta reacción de su cambio automático de variador continuo.
Éste es realmente el punto más débil del Subaru Impreza, un coche bien ejecutado y equipado, que representa una soberbia relación precio/producto. Y eso que el motor es muy agradable, suave y con una buena capacidad de estirada, pero tanto al volante como sobre las frías cifras que marca el instrumental de medición de nuestro Centro Técnico se siente lento. Tanto en aceleración como en recuperación es el que más segundos necesita para cubrir los distintos ejercicios, aunque muchos de sus rivales no puedan combinar al tiempo la tracción total y el cambio automático. Además, sin por ello ser de los que menos consume.
CONSUMOS | Subaru Impreza 1.6i-S CVT Lineartronic Executive AWD |
Consumo en ciudad | 7,5 l/100 km |
Consumo en carretera | 6,4 l/100 km |
Consumo medio | 6,9 l/100 km |
Autonomía en ciudad | 663 km |
Autonomía en carretera | 778 km |
El Subaru Impreza convence por bastidor, habitabilidad —es uno de los compactos de mayor longitud—, el salto cualitativo en la terminación de su interior, su equipamiento y versatilidad, pero por sus prestaciones es aconsejable para conductores de carácter tranquilo.
Subaru Impreza 1.6i-S CVT AWD: las claves
- Sólo un motor 1.6 de gasolina bóxer con tracción total y cambio automático de variador continuo. No hay prevista una transmisión manual.
- Más adelante se ampliará la gama con un 2.0i de 156 CV, también automático y tracción total.
- Dos acabados: Sport, por 20.400 €, y Executive, que por 2.800 € añade un mayor número de asistentes electrónicos (cambio de luces, detector de tráfico cruzado…), llave manos libres y pantalla táctil de 8", entre otras muchas cosas.
ESPACIO | Subaru Impreza 1.6i-S CVT Lineartronic Executive AWD |
Anchura delantera | 144 cm |
Anchura trasera | 139 cm |
Altura delantera | 95/102 cm |
Altura trasera | 93 cm |
Espacio para piernas | 77 cm |
Maletero | 370 litros |