Opel Ampera-e: conducimos un eléctrico de capricho

Opel acaba de presentar su coche eléctrico Ampera-e, que ofrece récord de autonomía en su segmento con 520 km homologados. Todo un capricho de 204 CV.

Pablo Mallo. Twitter: @p__mallo

Opel Ampera-e: conducimos un eléctrico de capricho
Opel Ampera-e: conducimos un eléctrico de capricho

Después de California (Estados Unidos), Oslo (Noruega) es el mercado más importante de coches eléctricos, y allí es precisamente donde nos hemos ido a conducir el Opel Ampera-e. El Opel Ampera-e se vende en Noruega desde diciembre de 2016 y posteriormente llegará a Alemania, Holanda y Suiza, pero no se sabe todavía la fecha de comercialización en otros mercados como España, donde su precio aún no se ha definido (será cercano al de un BMW i3). A diferencia del anterior Opel Ampera, que era un eléctrico de autonomía extendida, el nuevo Opel Ampera-e es un coche eléctrico puro, pero con una gran capacidad de baterías que le permite homologar 520 km de autonomía en el ciclo NEDC (New European Driving Cycle). Por cierto, es más pequeño que el anterior Opel Ampera, ya que se enmarca dentro del segmento B, con 4,16 metros de longitud, 5 plazas y 381 litros de maletero. 

La capacidad de las baterías de iones de litio del Opel Ampera-e es de 60 kWh, con un peso de 430 kg. Están fabricadas por LG (como las del Renault Zoe) y van ubicadas bajo el piso del habitáculo, que es completamente plano, haciendo que su centro de gravedad sea muy bajo. Cuentan con refrigeración líquida y una garantía de 8 años o 160.000 km. En cuanto a su recarga, en un enchufe convencional gana 6 km de autonomía cada 30 minutos de carga (en el peor de los casos), aunque los tiempos mejoran en caso de utilizar un poste de recarga tipo Wallbox opcional, que ofrece Opel en postventa, así como en cargadores rápidos y cargadores públicos de 50 kW (hasta 150 km de autonomía por cada 30 minutos de recarga). Tanto la recarga como la preclimatización y el estado del coche se controlan desde una aplicación para el teléfono, en la que también se pueden ver los puntos de recarga y planificar rutas en función de ello. De igual modo, se puede programar la carga para que, en cargadores públicos, sólo se recargue hasta el 40% de capacidad de las baterías, para pagar menos. 

Opel Ampera-eOpel Ampera-e: en movimiento

En cuanto al comportamiento del Opel Ampera-e, resulta un coche muy agradable de conducir, con una gran respuesta, inmediata, contundente y muy gratificante. No en vano, su motor brinda 204 CV y 36,7 mkg. Consigue pasar de 0-50 km/h en 3,2 segundos, de 0 a 100 km/h en 7,3 segundos, y logra una velocidad máxima de 150 km/h (156 de marcador), autolimitada para conservar la autonomía de las baterías. La tracción es a las ruedas delanteras, por lo que en determinados momentos, como adelantamientos, conviene sujetar el volante con firmeza debido al elevado par motor, sobre todo si pisas a fondo el acelerador durante el cambio de carril, como ocurre en algunos deportivos de tracción delantera. Pese a todo, la gestión electrónica hace que la llegada de la potencia sea suficientemente progresiva para que el tren delantero no pierda tracción en arrancadas, y es a partir de unos 60 km/h cuando se "desata" una mayor cantidad de empuje. En cuanto al control de tracción (desconectable), realiza un trabajo muy preciso tanto en pavimentos deslizantes como en curvas cerradas si nos excedemos con el acelerador. A pesar del contenido tamaño del Opel Ampera-e y un peso de 1.691 kg, la estabilidad, eficacia y sensación de seguridad en curva es alta. La precisa dirección y unas equilibradas suspensiones logran un comportamiento dinámico muy destacable para tratarse de un coche eléctrico. 

El Opel Ampera-e cuenta con varios modos de conducción. Mediante el selector del cambio (de tipo by-wire) se puede activar la modalidad L, que retiene mucho al dejar de acelerar (regenerando más energía) y prácticamente no es necesario utilizar los frenos, pues basta modular el pedal del acelerador para ajustar el grado de deceleración, que llega hasta la parada total si es necesario. Es decir, al igual que en el BMW i3, si no aceleras, el coche "frena" y llega a detenerse por completo, con una detención final extremadamente suave y confortable para los ocupantes. El grado de frenada regenerativa se puede incrementar todavía más mediante una leva situada a la izquierda del volante, una característica que sólo hemos visto en el Opel Ampera-e y que resulta muy cómoda. La otra modalidad de uso es el modo de marcha D, más convencional, ya que retiene muy poco al dejar de acelerar, por lo que sí es necesario utilizar los frenos o, en su defecto, la leva del volante. Por último, cuenta con una tecla Sport que incrementa ligeramente la respuesta del acelerador y la dureza de la dirección. 

Opel Ampera-eEntre los sistemas de seguridad del Opel Ampera-e cabe destacar el asistente activo de mantenimiento de carril, que gira el volante de manera autónoma guiándose por los datos obtenidos de la cámara frontal (lee las líneas de la carretera), detección de peatones con frenada automática (también basándose en la cámara frontal o el radar delantero), aviso de tráfico trasero cruzado, control de ángulo ciego, sistema OnStar y neumáticos antipinchazos, realizados con fibras de material viscoso autosellante. 

El Opel Ampera-e tampoco se queda corto en cuanto a equipamiento de confort y conectividad, con posibilidad de cuatro asientos calefactados tapizados en piel, volante calefactado, cuatro puertos USB, cargador por inducción para el teléfono, Apple CarPlay, Android Auto y equipo de sonido Bose. La amplitud interior es muy buena, aunque faltan asideros del techo en las plazas traseras y hay abundancia de plásticos duros. Destaca positivamente el cuadro de mandos digital, que se puede configurar con tres diseños distintos (con más o menos cantidad de información), así como una pantalla táctil central cuyos menús son muy completos y de diseño moderno. Es un coche eléctrico que gusta y nos ha dejado muy buen sabor de boca, sólo superado en autonomía por los exclusivos y potentes Tesla, mucho más caros.   

También te puede interesar:

Opel Ampera-E: 150 km con recarga de 30 minutos

Opel Ampera-e: así será finalmente este nuevo eléctrico

Salón de París 2016: Opel Ampera-e, ahora eléctrico puro