Hallan en Australia un sifonóforo de 46 metros, posiblemente el animal más grande del mundo

El Schmidt Ocean Institute considera que el sifonóforo encontrado cerca de la costa de Australia podría ser el ejemplar más largo de esta especie encontrado hasta ahora.

Mundo Geo

https://youtu.be/TvL9YOsCKyQ

Científicos del Schmidt Ocean Institute (fundación privada con sede en Palo Alto, Estados Unidos) y del Museo de Australia Occidental han dado a conocer los resultados de su más reciente expedición en aguas profundas de los cañones de Ningaloo, en el océano Índico, a unos 1.500 kilómetros de la costa oestes de Australia. Durante la expedición no solo han encontrado hasta 30 especies desconocidas, sino que también han podido filmar lo que ya se considera como uno de los ejemplares más espectaculares captados hasta hoy: un sifonóforo del género Apolemia (animal marino de orden de los cnidarios hidrozoos, emparentados con las medusas) de 45,72 metros de longitud.

Sifonóforo descubierto en Australia. Schmidt Ocean Institute
El sifonóforo descubierto en Australia mide casi 46 metros de longitud. Schmidt Ocean Institute

"Todos quedaron impresionados cuando apareció", comentó a la revista ScienceAlert, en una información recogida por el diario ABC, los biólogos Nerida Wilson Lisa Kirkendale, del Western Australian Museum. "Hubo mucha emoción. La gente entró a la sala de control desde todo el barco. Se ven comúnmente sifonóforos, pero este era mucho más grande y de un aspecto inusual", continúan. Aunque se han hecho estimaciones, aún no se ha medido formalmente, si bien los investigadores piensan que "parece ser más largo que cualquier otro animal en el planeta".

Con sus casi 46 metros de longitud, el sifonóforo encontrado en Australia podría ser el animal más largo del planeta 

El descubrimiento del masivo sifonóforo de cuerda gelatinosa, una colonia flotante de pequeños zooides que se clonan miles de veces en cuerpos especializados que se unen para trabajar en equipo, fue solo uno de los hallazgos únicos entre algunos de los invertebrados marinos y de peces más profundos alguna vez grabado para Australia occidental. Además del masivo sifonóforo, los científicos encontraron los primeros hidroides gigantes en Australia, descubrieron grandes comunidades de esponjas de vidrio en Cape Range Canyon y observaron por primera vez en Australia Occidental el calamar pulpo bioluminiscente de Taning, el pepino de mar de cola larga y muchos otros moluscos, percebes y especies de langosta. Algunas de las especies recolectadas se exhibirán en el Museo de Australia Occidental.

Entre las especies encontradas figuran varios tipos de langosta. Schmidt Ocean Institute
Entre las especies encontradas figuran varios tipos de langosta. Schmidt Ocean Institute

A la científica principal del Museo de Australia Occidental, doctora Nerida Wilson, se unieron también investigadores de la Universidad de Curtin, Geoscience Australia y el Instituto de Oceanografía Scripps para explorar los cañones de Ningaloo en el Océano Índico. Utilizando un robot submarino, ROV SuBastian, completaron 20 inmersiones a profundidades de hasta 4.500 metros durante 181 horas de exploración. Gracias a este nuevo robotl los científicos pudieron por primera vez explorar cañones y arrecifes de coral en aguas profundas en Australia que nunca antes se habían visto.

Sospechábamos que estas áreas de aguas profundas serían diversas, pero nos sorprendió la importancia de lo que hemos visto", dijo Wilson en un comunicado. 

Algunas de las especies halladas durante la campaña científica del Museo de Australia Occidental
Algunas de las especies halladas por el equipo de científicos durante la expedición. Schmidt Ocean Institute.

La expedición es parte de la iniciativa de un año de Schmidt Ocean Institute en Australia y el Pacífico para llevar a cabo una serie de expediciones de ciencia e ingeniería con equipos de científicos e investigadores de todo el mundo. 

¿Qué son los sifonóforos?

Los sifonóforos son criaturas marinas coloniales que pertenecen a los cnidarios, un filo que incluye las medusas, anémonas de mar, las hidras y los corales. Los biólogos marinos han investigado hasta 180 especies distintas de sifonóforos, la mayoría alcanzan los 40 metros de longitud, son bioluminescentes y apenas alcanzan el grosor de un palo de escoba.

Todo este ser está compuesto de individuos más pequeños llamados zooides, pequeños organismos individuales asexuados que cumplen tareas distintas dentro de la colonia. Tienen la capacidad de clonarse miles de veces y convertirse en los órganos que necesita el animal total: es decir, como las células de nuestro cuerpo cuando se especializan, los zooides se convierten en tentáculos punzantes para recoger la comida o incluso señuelos rojos para atraerla. Otros se crean para la reproducción y otros para que el «superanimal» se pueda desplazar.

Son criaturas de aspecto gelatinoso y muy voraces, capaces de dar caza a sus víctimas con nematocistos, una suerte de cápsulas rellenas con un veneno y un arpón que se dispara al ser rozados.

Los sifonóforos viven nadando bajo el agua, con la excepción de una especie flotante, la fragata portuguesa Physalia physalis, y de la familia Rholadiilae, que se agarra al fondo.

En una colonia tan masiva como la hallada por el equipo de la expedición submarina, tendría que haber miles de millones de estos órganos-individuos unidos trabajando juntos, con el objetivo de escudriñar las profundidades marinas y hallar comida, que comparten entre todos a través de un tallo al que todos estan conectados, una especie de rama vertical que también sirve como camino para las señales nerviosas.

Fuente: Schmidt Ocean Institute / ABC / La Vanguardia