El Skoda Scala no es uno de los compactos de más éxito del mercado. Eclipsado por modelos como los Seat León, Peugeot 308, Kia Ceed, Hyundai i30 o Renault Mégane, que venden hasta cuatro veces más unidades, la marca no arroja la toalla y seguirá apostando fuerte para uno de sus vehículos convencionales que, al margen de los SUV, más comercializa, solo por detrás del Fabia, pero superando a Octavia y Superb.
Así, de cara a los próximos meses, Skoda prepara ya el lanzamiento del nuevo Scala 2023, un modelo que además estrenará una actualización que, posteriormente, podría llegar a otros coches de la marca, como al Kamiq, por poner el primer ejemplo. En Internet ya comienzan a desfilar las primeras unidades camufladas rodando en última fase de pruebas.
Skoda Scala Facelift Spied Again, Looking Like A Stretched Fabia | Carscoops #carscoops https://t.co/Pi7XsUewWs
— Carscoops (@Carscoop) June 3, 2022
Skoda Scala 2023: plataforma y novedades
Basado en la versión alargada de la plataforma MQB A0, es decir, la misma que ya emplean los SUV Volkswagen T-Cross, Seat Arona o Skoda Kamiq, el nuevo Scala seguirá a cambio posicionado en el segmento C tradicional de mercado, el de los compactos, para seguir compitiendo, por ejemplo, con los VW Golf y Opel Astra, además de todos los coches rivales mencionados al inicio. Sus dimensiones no variarán en exceso, proponiendo 4,36 metros de carrocería.
Con un habitáculo siempre espacioso, y con el objetivo ya también de postularse ahora en la gama de Skoda como modelo que también debe llenar el hueco del desaparecido Fabia Combi, buscando satisfacer a los clientes de la marca que busquen esta alternativa práctica y convencional de turismo, el nuevo compacto tendrá un importante lavado de cara.
Nuevos por ejemplo serán los paragolpes y la parrilla, para ofrecer un nuevo diseño frontal en el Skoda Scala, ahora más limpio. Nuevos gráficos LED, tomados del recientemente estrenado Fabia, también serán algunas de las novedades, mientras que en la trasera destacan cambios menores, que afectarán únicamente al paragolpes y poco más.
Por dentro el Skoda Scala seguirá apostando a un ambiente muy atractivo, montando una instrumentación digital de 10,25 pulgadas y una pantalla táctil en el salpicadero algo más grande, ahora de 9,2 pulgadas. El sistema de información y entretenimiento se beneficiará de una gran actualización de software, mientras que se añadirán también más funciones de conectividad.
A nivel de gama mecánica, el Skoda Scala está hoy disponible junto al motor 1.0 TSI de gasolina de 3 cilindros, con 95 y 110 CV, además de con la versión 1.0 TGI de 90 CV y alimentada tanto por gasolina como por gas natural GNC. Ya por arriba, un motor 1.5 TSI de 4 cilindros y 150 CV de potencia completa una oferta de la que ya desaparecieron las versiones diésel. En este sentido, no se esperan cambios para un compacto que debutará antes de que acabe el año.