Mientras que la Zona de Bajas Emisiones de Barcelona sufrió una moratoria por la pandemia del coronavirus (se prevé iniciar las multas a mediados de este mes de septiembre), el Ayuntamiento de la Ciudad Condal sigue trabajando para transformar la movilidad de vehículos, bicicletas y peatones en sus calles.
En este sentido, el portal digital de ABC informa de cómo avanzan los planes en forma de obras en muchas de las calles importantes de Barcelona, que afectarán directamente al uso del vehículo privado y que proporcionarán un mayor espacio para peatones y ciclistas. El equipo de Ada Colau ya sorprendió en los últimos meses con unas coloridas y polémicas modificaciones en algunas calles, el nuevo “urbanismo táctico” en la capital barcelonesa.
Ahora, el Ayuntamiento ha empezado ya a licitar las obras que tendrán un importante impacto en las arterias principales de la ciudad, y cuyo coste asciende a 2,5 millones de euros. Por ejemplo, se prevé ampliar hasta los seis metros las aceras entre las plazas de Catalunya y Universitat, se ampliarán también las aceras en la calle Pelai (lo que reducirá un carril para los coches), se creará un vial de bicis específico en toda la calle Aragó (también eliminará un carril para el tráfico de coches) y otro carril ciclista en la Zona Franca (en ambos sentidos).
Las calles de Barcelona sufrirán grandes cambios en los próximos meses. Foto: iStockMás actuaciones en Barcelona tras el verano
También se prevé ampliar los carriles bus en algunos puntos de la ciudad, como en la Gran Vía o en la avenida Diagonal, entre la calle Girona y Francesc Macià, así como en la salida de la ciudad hacia el Baix Llobregat.
Tras el verano, se volverán a realizar cortes puntuales de enclaves de la ciudad durante los festivos: el Ayuntamiento ya está licitando, según ABC, el contrato de coordinadores y servicios auxuliares que informarán a pie de calle de los cortes. Los sábados y domingos se cerrará el tráfico, por ejemplo, en la Via Laietana, el paseo Sant Joan o Pi i Margal; la calle Aragón, un fin de semana al trimestre; y así con más arterias principales.
Por último, se quiere aumentar la vegetación en los chaflanes de los espacios peatonales de la calle Rocafort o en las confluencias de las calles Aragó, Diputació y València.









