El sensor ECT se encarga de mantener al margen la temperatura de tu vehículo, protegiendo su motor, al ofrecerte una protección extra contra posibles fallos.
Si quieres saber cómo es capaz de hacer esto y cómo de efectivo es en su trabajo, entonces quédate aquí y averígualo en este artículo.
¿Qué es el sensor ECT?
Para controlar su sistema de refrigeración, tu coche recurre a un pequeño dispositivo conocido como Engine Coolant Temperature (ECT), o Sensor de Temperatura Refrigerante, en español. Se trata de un sensor que cuida de cerca este sistema mientras tu coche está en funcionamiento. Es básicamente un seguro, en caso de que el sistema de refrigeración falle y la temperatura del coche suba demasiado.
Gracias a él, se puede regular la activación de los ventiladores del radiador, y se puede ajustar la cantidad de combustible necesaria para una función óptima. Así, este sensor evitará importantes y muy caras averías del motor como consecuencia de altas temperaturas.
Características del sensor ECT
Profundicemos más en su funcionamiento analizando algunas de sus características:
Ubicación estratégica
Para cumplir con éxito su función, suele estar situado cerca de la culata del motor, en un punto donde el líquido refrigerante alcanza su máxima temperatura. Esta ubicación permite al sensor detectar con precisión los cambios térmicos.
Tecnología termistor
El sensor ECT emplea un sensor de temperatura y una resistencia del tipo NTC (Negative Temperature Coefficient). Esta configuración de componentes permite ajustar su resistencia interna en relación con la temperatura del refrigerante.
Comunicación con la unidad de control
La información que este sensor tiene sobre el sistema refrigerante es crucial a la hora de hacer ajustes en la mezcla del combustible y otros parámetros relacionados con la temperatura, y usa la unidad electrónica de control del motor para enviar regularmente estos datos.
Regulación del sistema de enfriamiento
Su función no se limita a medir la temperatura, el sensor ECT es parte esencial del sistema de enfriamiento del vehículo, activando ventiladores del radiador y ajustando la mezcla de combustible para mantener una temperatura óptima del motor.
Protección contra daños
El correcto funcionamiento del sensor ECT es crucial para prevenir daños severos en el motor debido a temperaturas extremas. Al detectar anomalías térmicas, permite tomar medidas preventivas y evitar averías costosas.
Desventajas de su uso
Si bien es una pieza vital para el correcto funcionamiento de tu coche, esto no la hace libre de fallos. Y es que, muchas veces, los indicadores de problemas incluyen un aumento en el consumo de aceite, lo que puede ser un inconveniente, no solo para el rendimiento del vehículo, sino también para tu economía. También puede emitir humo negro por el escape, y presentar indicadores de temperatura inusuales en el tablero y ralentí inestable, entre otros.
El sensor ECT es un pequeño gigante en el mundo automovilístico, que asegura que tu motor esté siempre en las mejores condiciones. Conócelo, cuídalo y permite que tu viaje sea más seguro y sin contratiempos.