No hace falta que lo niegues, porque a todos nos ha pasado. ¿Cuántas veces has ido a buscar tu coche y no recordabas dónde lo habías aparcado? Llegas a una calle y no está. Un poco más allá, tampoco. Quizás en esta de al lado… Tampoco. Y comienzas a ponerte nervioso.
Pero estos problemas son muy fáciles de solucionar con un Smartphone o, simplemente, prestando un poco de atención cuando nos bajamos del coche, antes de empezar a andar por un lugar desconocido.
Si vas a una ciudad desconocida
Lo primero que te recomendamos cuando aparcas tu coche es mirar el nombre de la calle (o el número, tal y como sucede en Estados Unidos) y si crees que no serás capaz de retenerlo en la memoria, apúntatelo en una nota en el teléfono móvil para tenerlo siempre a mano. Otro truco muy útil, fijate en algún local cercano si no ves el nombre de la calle.
Con un smartphone lo tienes muy fácil. Lo único que tienes que hacer es activar el servicio de navegación del teléfono e introducir la calle donde aparcaste el coche, o el nombre del local de al lado. Aplicaciones como Google Maps te darán indicaciones hasta llegar al mismo. Si, por el contrario, no dispones de él, el nombre de la calle y de la tienda te permitirá preguntar a otros transeúntes.
Si vas a alejarte mucho de él en un sitio que no conoces, otra opción es introducir la dirección en Google Maps y hacer un pantallazo del mapa. A continuación, amplía el mapa y haz otro pantallazo. Esto te permitirá situar al coche en un lugar concreto dentro de una ciudad grande. Buscar qué parada de metro es la más cercana también te ayudará.
Además, recuerda que Google Maps funciona sin conexión a Internet si previamente nos hemos descargado un mapa. Una gran solución si no cuentas con roaming en el país de destino es utilizar este sistema offline. Descarga el mapa antes de salir de viaje y podrás utilizarlo como en cualquier otro momento pero sin miedo a sobrecargos por el uso de datos móviles fuera de tu país.
Si estás en un aparcamiento
Si has ido a un centro comercial o un aeropuerto y no recuerdas dónde aparcaste el coche, es probable que encontrarlo te lleve un buen rato, aunque, al menos, sí sabes que sólo tienes que ir planta por planta buscándolo.
Eso, o presta atención cuando pongas un pie en el suelo. En un aparcamiento sólo tienes que aplicar el mismo truco que en una ciudad desconocida. Nada más bajarte, apunta el número de la planta en la que estás situado y aprovecha todas las indicaciones que puedan resultarte útiles como el número de la plaza, una letra en las columnas o el color del que están pintadas las mismas. Incluso los hay que incluyen dibujos de animales o figuras similares para facilitarnos la búsqueda.
Siri al rescate
Si eres un usuario de Apple, Siri puede echarte una mano si no encuentras tu coche. Lo primero que debes hacer al bajarte del coche es decirle al asistente del iPhone: “He aparcado mi coche aquí". El sistema guarda la información (la confirma por el servicio de voz) y, cuando vuelvas a él, sólo tendrás que decirle a Siri: “Llévame hasta mi coche". El teléfono abrirá automáticamente la aplicación Mapas y te muestra las indicaciones necesarias para volver al vehículo.
