La llegada de las matrículas digitales, que llevan ya un centenar de coches en California (Estados Unidos) dentro de un programa piloto, está generando tanto entusiasmo como debate al permitir su ubicación.
Según datos del Departamento de Vehículos Motorizados (DMV) se han tramitado un total de 116 matrículas digitales en California, que muestran no solo la identificación del vehículo, sino también el pago de los impuestos asociados al mismo.
Este sistema de identificación electrónica, “la primera placa digital del mundo”, ha sido diseñada y producida por la empresa Reviver Auto, y ha ido más allá de la idea inicial de su fundador, Neville Boston. “Mi idea era solamente tener un sistema de registro electrónico del vehículo ante el DMV. No obstante, una vez empezó a trabajar el proyecto con las autoridades del Estado, sus funciones se ampliaron, en una labor coordinada con el DMV, agencias locales y la legislatura estatal, según Boston.
Matrículas digitales ¿cómo funcionan?
Las matrículas digitales ofrecen al usuario una pequeña área en la pantalla para colocar mensajes personales, reproducir avisos de alerta de secuestro infantil u otros temas a su elección. Además, una vez pagados los impuestos anuales del vehículo, la placa actualiza automáticamente el año de vencimiento, reemplazando así la tradicional pegatina que se envía por correo y que se debe pegar en la matrícula metálica convencional.
Este sistema, que ya se prueba a en ciudades como la capital del estado, Sacramento, tiene un precio de 699 dólares (599 euros). Las matrículas digitales usan la misma tecnología de los libros electrónicos Kindle y un sistema de comunicación inalámbrica a través de la aplicación Pocket.
Por el alto precio y por la posibilidad de que el Gobierno rastree los desplazamientos y la ubicación del vehículo, esta iniciativa electrónica está creando desconfianza.
Neville Boston asegura que la información personal del usuario es controlada únicamente por su dueño y que la ubicación del vehículo es solo un sistema de posicionamiento de satélite (GPS), que puede ser desactivado en cualquier momento por el dueño.
El DMV ha autorizado el uso experimental de la matrícula trasera, por lo que los usuarios deben usar en el frontal una placa metálica convencional. Además, dentro de las condiciones establecidas por DMV para el uso de la placa electrónica es que el propietario debe mantener dentro del vehículo la placa original y un escrito en el que la agencia autoriza la utilización de la digital.
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