Qué bien se ha circulado por lo general durante todo el verano y los primeros días de septiembre. Pero se acabó: la realidad del día a día ha vuelto. Por eso, para afrontar los atascos que ya se forman en todas las ciudades, te contamos todos los trucos que, si todos los conductores pusiéramos en marcha, supondrían eliminar muchas congestiones.
Una de ellas, quizá la más importante y mediática desde que un tuit de la Guardia Civil nos la ha mostrado, es la conocida “técnica de la cremallera". Pero, ¿en qué consiste? Como la mayor parte de los atascos suelen generarse por el exceso de la capacidad máxima de las vías, fundamentalmente provocados por incorporaciones o desapariciones de carriles, este método consiste en que los conductores alternen siempre el paso de vehículos: uno de un lado y otro del otro… como puedes ver en el vídeo que acompaña al tuit.
Así, cediendo siempre el paso de manera alternativa entre dos carriles, la Guardia Civil asegura que la fluidez del tráfico mejoraría muchísimo cada día. Se trata de una práctica de lo más sencilla y altruista entre todos los conductores, con un gran beneficio para la circulación. Pero, junto a esta técnica, es ahora la propia DGT la que nos da otros trucos, muchos obvios aunque no siempre llevados a la carretera.
¿Hart@ de aguantar el atasco mañanero y de que no te dejen pasar en el estrechamiento o la incorporación?
— Guardia Civil 🇪🇸 (@guardiacivil) February 1, 2019
Si tod@s aplicamos la técnica de la #cremallera, la fluidez del tráfico mejoraría, ¿No crees?
Ah...¿Que ya lo sabías?...😉pues haz RT
#FelizFinde pic.twitter.com/8nL3KA7KdR
Evita el efecto mirón y el acordeón
Otra de las causas habituales de atascos es el provocado por los accidentes o averías en carretera y el conocido como “efecto mirón". Disminuir la velocidad y realizar frenazos repentinos con el objetivo de ver lo que ha pasado en la vía, no solo es peligroso por poder desembocar en más accidentes, sino que provoca fuertes retenciones en el propio carril del suceso e, incluso muchas veces, en el carril o carriles contrarios. Eliminar de nuestra rutina esta práctica también traerá grandes beneficios.
La planificación de nuestros viajes, si es posible, también es un factor que contribuiría enormemente a descongestionar las carreteras. ¿Cómo? Evitando desplazamientos los días y horas con mayor afluencia tradicional (si es posible, claro), ajustando los viajes a momentos en los que se prevé un menor índice de circulación. Para ello, la propia DGT informa habitualmente y ante operaciones especiales de tráfico a través de todos sus canales y redes sociales.
Conducir lo más pausado y relajado posible, sin frenazos, acelerones o cambios repentinos de carril innecesarios, también influye a generar menos atascos. Es lo que la DGT también llama “efecto acordeón", ya que una conducción agresiva suele ocasionar finalmente caídas bruscas de velocidad con continuos frenazos y acelerones. Una velocidad inferior y constante mejora la circulación.
Por último, la DGT también aconseja señalizar el coche correctamente en caso de accidente o avería en carretera. Además, lógicamente, de evitar peligros ante nuevas colisiones o atropellos, señalizar bien con triángulos a distancia y retirar el vehículo al arcén lo antes posible si se puede, también contribuye enormemente a evitar atascos. Lo habrás comprobado alguna mañana camino al trabajo ante un simple golpe o coche averiado.