Desde que la Ley de Seguridad Vial instaurase a partir de mayo de 2014 la “tolerancia cero” en materia de drogas y conducción, hemos venido hablando de las diferentes sanciones a las que se enfrentan los conductores que son detectados con presencia de drogas en su cuerpo y que pueden influir en su conducción
De hecho, la ley diferencia entre sanción administrativa, para castigar la mera presencia de drogas en el organismo, y sanción penal, para los conductores que conducen bajo la influencia de las drogas. Para los primeros, la multa es de hasta 1.000 euros y la retirada de hasta 6 puntos en el carné; para los segundos, podría terminar en prisión de 3 a 6 meses, multas de hasta 144.000 euros o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 años.
Con este telón de fondo, te interesa saber que, como conductores, podemos dar falsos positivos solo por haber tomado ciertos medicamentos de forma previa.
Medicamentos que pueden dar falsos positivos en drogas
Al tener muchos de estos medicamentos una estructura parecida a las drogas, el aparato utilizado por los agentes de tráfico puede detectarlos como drogas en las pruebas. Estos medicamentos pueden dar falsos positivos por anfetaminas, metadona, opiáceos, metilanfetaminas, canabinoides, benzodiacepinas o fenciclidina.
Pero, ¿qué fármacos pueden producir falsos positivos? En este caso, nos referimos a los que pueden dar por error positivo por consumo de drogas en test en orina:
- Bromfeniramina (Ilvico).
- Bupropion (Zyntabac, Elontril).
- Clorpromazina (Largactil).
- Clomipramina (Anafranil).
- Dextrometorfano (Romilar).
- Difenhidramina (Bisolvon antitusivo compositum y otros).
- Doxilamina (Cariban, Dormidina y otros).
- Ibuprofeno.
- Naproxeno.
- Prometazina (Actithiol antihistamínico, Fenergan expectorante).
- Quetiapina (Seroquel).
- Ofloxacino (Surnox).
- Ranitidina.
- Sertralina.
- Tioridazina.
- Trazodona (Deprax).
- Venlafaxina.
- Verapamil.
Efectos de los medicamentos en la conducción
Ya no solo hablamos de que un medicamento puede provocar que des un falso positivo en un control anti drogas; es que muchos de ellos tienen efectos adversos que pueden afectar a las capacidades del conductor mientras está al volante: somnolencia, aumento del tiempo de reacción, disminución de reflejos…
Según la DGT, los fármacos más peligrosos al volante son las benzodiacepinas, opioides, antipsicóticos, antiepilépticos, antidepresivos y antihistamínicos. En este último caso, afectan más sobre todo los de primera generación; con los antidepresivos, se debería esperar a que el tratamiento se haya estabilizado. Y por ejemplo, ya la propia enfermedad que tratan los antiepilépticos incapacita de por sí para la conducción.
Recuerda que los medicamentos que son peligrosos para la conducción vienen con un pictograma en la caja. Estos no prohíben la conducción, pero alertan de los posibles efectos que puedan tener para el conductor.