Malas noticias, de momento eso sí no confirmadas, para los amantes de los deportes de invierno, la naturaleza y el senderismo que durante el año viajan a Andorra para turismo de ocio y actividades de tiempo libre. Si prospera una nueva medida en la que ya trabaja el Gobierno del pequeño país vecino, muy pronto tendrían que pagar una tasa en forma de impuesto por circular por sus carreteras. Y puede que no sea precisamente barata…
Así ha trascendido este plan del Ejecutivo de Andorra, que planea ya aprobar una nueva normativa para aplicar un proyecto que permita al país cobrar un nuevo impuesto de circulación a los coches extranjeros, siguiendo probablemente el ejemplo de Suiza y de la viñeta que obliga a comprar y pegar en el parabrisas de los coches para poder usar sus infraestructuras.
Andorra quiere limitar el flujo de turistas y condiciona la aplicación de la tasa al consenso
Destino principal de invierno para amantes del esquí y la naturaleza, la medida basa su objetivo en la delimitación del enorme flujo de turistas que cada año aumenta especialmente en períodos invernales, con el interés también de poder preservar mejor todos sus parajes naturales y áreas protegidas. La confirmación de este proyecto, eso sí, ha creado en las últimas horas una gran polémica, tanto dentro como fuera de Andorra, llevando incluso al Gobierno a tener que dar explicaciones.

Así, el propio jefe de Gobierno de Andorra, Xavier Espot, ha asegurado este lunes que condicionará la viñeta a los vehículos extranjeros “al acuerdo y a una aplicación ágil”, asegurando que su cobro no se hará efectivo “si previamente la medida no genera un consenso amplio y si no existen garantías para aplicarla de forma fácil”.
Durante una entrevista concedida en Radio Nacional d’Andorra, Espot ha afirmado que se trata aun así de una posible medida que todavía “no está suficientemente madura”, por lo que debe ser objeto de concertación con todos los sectores implicados. El máximo responsable del ejecutivo andorrano ha subrayado que la propuesta nació de un proceso participativo sobre el transporte público que se llevó a cabo con toda la ciudadanía y actores económicos del país.
Modelo suizo de viñeta y tasa variable para temporada alta y baja
Espot considera que otros países de nuestro entorno ya activan tasas similares a las previstas ahora por Andorra, basadas en que “en el Principado existe también un debate sobre limitar el flujo de turistas”.

De llevarse a la práctica la medida, Andorra estudia poder establecer una tasa variable en función de temporadas, más caras en la alta (especialmente la invernal) y más barata en la baja. La futura reglamentación que se estudia es, como hemos avanzado, el modelo suizo de viñeta, que obliga a los conductores extranjeros a llevar una etiqueta pegada al parabrisas del coche y que hay que abonar antes de utilizar sus autopistas. En Eslovenia o Austria hay medidas similares.
En Suiza, en concreto, el precio de esta viñeta cuesta unos 40 francos, es decir, el equivalente aproximado a 42 euros al cambio. En 2023, Andorra alcanzó un número de turistas y visitantes que rondó los 10 millones, superando ampliamente, según el Gobierno, la capacidad de preservación de sus recursos naturales. Obviamente, los conductores españoles y franceses serían los más perjudicados si su gobierno implanta esta nueva tasa, ya que concentran la inmensa mayoría de visitantes extranjeros al país. Veremos en qué queda finalmente este proyecto, que no será fácil de aprobar.