Los últimos datos emitidos por el Archivo de Vehículos de la Comunidad de Madrid a AEMA-ITV, la asociación de estaciones de esta región, son concluyentes: la prueba de control de emisiones contaminantes causa cada vez más suspensos y fallos en los vehículos que se presentan a la inspección obligatoria. Y es que, si en el primer trimestre de 2022 se detectaron aquí hasta 35.910 defectos, siendo la causa del 23,2 por ciento de los rechazos, ahora en el último trimestre de año estas cifras ascienden a 55.048 defectos graves, siendo origen ya del 27,2 por ciento de los suspensos.
Según confirma AEMA-ITV, esta evolución se viene registrando de forma paulatina en los últimos meses, dejando constancia del grave problema que comienza a suponer para muchos vehículos pasar esta prueba rutinaria de emisiones contaminantes, que ya es obligatoria en las inspecciones de ITV. Sin embargo, mediante un buen mantenimiento y los cuidados adecuados, ningún vehículo tiene por qué sucumbir a este test.
Así puedes preparar la prueba de emisiones de la ITV
Pero, ¿cómo podemos prevenir el suspenso por emisiones contaminantes o asegurarnos los propietarios de que nuestro vehículo superará la prueba sin mayor dificultad? Desde la propia asociación de ITV’s nos lo explican.

AEMA-ITV considera que la situación de suspensos y rechazos por culpa del exceso de emisiones contaminantes de los vehículos “podría cambiarse con un buen mantenimiento del vehículo”. En este proceso, y para asegurarnos de la limpieza de nuestro vehículo, es fundamental que, para empezar, los filtros de aire, aceite y combustible se encuentren en buen estado, limpios y sustituidos en el período de mantenimiento que corresponde. Aquí tenemos el primer punto básico.
Pero hay más, porque “un buen cuidado del filtro de partículas FAP permite garantizar que el vehículo se encuentra en buenas condiciones para superar esta prueba”, si es que nuestro coche dispone de este elemento. Lo ideal para que funcione como ha sido concebido sería, por lo general, que el motor lleve encendido unos 20-30 minutos y que la velocidad esté por encima de las medias del tráfico urbano, para trabajar a regímenes altos en ese tramo. Si no cumplimos estos requisitos con frecuencia, el filtro puede no realizar su cometido correctamente.
Así que, obviamente, los usos eminentemente urbanos, con poca carga en el motor y regímenes bajos (circulando por lo general a menos de 2.000 rpm), sumado a arranques en frío y frecuentes paradas, son claros enemigos de este componente mecánico. Para intentar extraer todo su potencial, es importante en estos casos que intentes salir al menos una vez a la semana a la carretera, momento en el cual el filtro de partículas aprovechará para depurarse y eliminar el hollín acumulado de la combustión. Te asegurarás así de su correcto funcionamiento al pasar la inspección.

La importancia de la prueba de emisiones: conviene no alarmarse
“La ITV ayuda a mejorar la calidad del aire controlando partículas y gases nocivos y contribuyendo a sacar de la circulación aquellos vehículos que puedan estar excediendo las emisiones permitidas y que además no se puedan reparar. La inspección técnica de vehículos es, sin duda, una acción esencial para minimizar el impacto medioambiental de los sistemas de transporte y, con ello, salvar vidas. Hay que recordar que, de acuerdo con datos de la Agencia Europea del Medio Ambiente, la contaminación atmosférica está relacionada con la muerte de más de 30.000 personas al año en España”, confirma Jorge Soriano, presidente de AEMA-ITV.
Aun así, tampoco hay que alarmarse. Pese al aumento de defectos graves detectados en las estaciones de ITV, AEMA confirma con sus datos que hasta el 81,3 por ciento de los vehículos que se presentan a inspección aprueba satisfactoriamente y sin problema la ITV a la primera. La cifra, además, aumenta hasta el 93 por ciento, en las segundas inspecciones.