Ni un momento, ni dos. Barcelona ha decidido poner fin a las invasiones del carril bus de la ciudad, que genera tantas congestiones y problemas circulatorios al no dejar avanzar a los vehículos que realmente tienen autorización para circular por él. Así que desde esta semana los más de 220 kilómetros de este tipo de calzada que hay por sus calles contarán con un nuevo aliado: un coche patrulla dispuesto a multar a todo aquel que incumpla las normas.
Y es que TMB (Transports Metropolitans de Barcelona) ha presentado este mismo lunes un nuevo vehículo, 100% eléctrico, diseñado para controlar las infracciones de carril bus por medio de dos cámaras incorporadas en su techo con la labor de fotografiar y leer las matrículas de todos aquellos vehículos no autorizados que parecen o estacionen en los carriles bus o en las paradas de estos. Aunque sea solo por un momento, no tendrán ya piedad.

Multas de hasta 200 € por invadir el carril bus
Las sanciones por realizar estas paradas oscilan ya hoy entre los 60 y los 200 euros, según ha informado el propio Ayuntamiento de Barcelona, a través del consejero delegado de TMB, Xavier Flores, quien en la presentación del vehículo ha confirmado que el nuevo vehículo cuenta “con toda la tecnología necesaria para tramitar la denuncia a los infractores”.
La medida persigue sobre todo castigar a los vehículos privados que a diario invaden estos carriles, así como a numerosas furgonetas que hacen tareas de carga y descarga en un lugar no permitido para ello. De momento, eso sí, las motos y coches que habitualmente se “cuelan” por el carril bus para avanzar no recibirán las sanciones de este vehículo que solo multará los estacionamientos. Es en ese caso la Guardia Urbana quien procederá a sancionar a los que lo invadan en movimiento.

En el nuevo vehículo de la TMB viajarán un trabajador de la compañía de transporte público al volante y un operario que manejará la tableta con la que se tramitan y validan las sanciones captadas por las cámaras. Estas podrán procesarse de manera automática o manual, enviando ya posteriormente los datos al Instituto Municipal de Hacienda para tramitar la denuncia.
El vehículo es un Nissan Leaf 100% eléctrico rotulado
El vehículo que controlará ya el carril bus de Barcelona es en concreto un Nissan Leaf 100% eléctrico, rotulado con el indicativo “Control fotográfico carril bus”, con lo que no se tratará en ningún caso de un coche camuflado, sino que su objetivo básicamente es disuadir de estas malas prácticas muy habituales.

Xavier Flores ha explicado así durante la presentación del nuevo vehículo que “la incorporación de este coche específico permitirá mejorar la eficiencia del servicio del transporte público en superficie, favoreciendo la movilidad gracias al aumento de la velocidad del bus y garantizando que se respeten los carriles por donde circula, además de mejorar la seguridad vial y reducir accidentes”.