La movilidad vuelve a sufrir un importante frenazo en España. Con el avance de los contagios por Covid-19 en casi todos los territorios, que está disparando de nueva la incidencia acumulada de la enfermedad en nuestro país y añadiendo una importante tensión en los centros sanitarios y hospitales, prácticamente todas las comunidades han decretado nuevas medidas restrictivas para intentar frenar la transmisión.
Si hasta ahora estas nuevas limitaciones afectaban principalmente a cierres perimetrales de municipios, provincias y/o regiones, así como a la aplicación de toques de queda y a reducción de la actividad comercial, en las últimas horas también comienza a reducirse el número de personas no conviviente que puede reunirse, y que hasta ahora, en función de los territorios, solía cifrarse entre 6 y 10 individuos.
Pues bien, con el anuncio de varias comunidades de limitar ya las reuniones a un máximo de 4 personas o al núcleo exclusivamente conviviente, los viajes en coche también van a sufrir variaciones y prohibiciones. En Andalucía, por ejemplo, la prohibición de reunirse ya más de 4 personas hasta el próximo 1 de febrero, cuando se revisará la medida, impide ya también que los coches privados puedan tener más ocupación en sus viajes, incluido el conductor, salvo que sean personas convivientes.

Hasta ahora el BOJA (Boletín Oficial de la Junta de Andalucía) ya recogía también en su artículo 42 para los territorios en nivel 3 y 4 de alerta, como la provincia de Cádiz al completo, que “en los transportes privados complementarios de personas en vehículos de hasta 9 plazas, incluido el conductor, cuando no todas convivan en el mismo domicilio, no se podrá ocupar el asiento del copiloto”.
Pero esta medida de 4 personas reunidas como máximo no solo se aplica ya en Andalucía. Murcia, por ejemplo, acaba de anunciar también nuevas restricciones prohibiendo en este caso los encuentros entre no convivientes, “tanto en espacios públicos como privados y tanto en interior o al aire libre, así como vehículos familiares”. Es decir, no podrá viajar ninguna persona que no sea conviviente en el coche, con lo que el número puede reducirse a 4 personas en función de la familia.
En Baleares, Mallorca e Ibiza también aplican esta misma medida de exclusividad de encuentros entre personas convivientes, mientras que otras comunidades como Aragón, Asturias o La Rioja también han limitado a 4 las personas que pueden reunirse e interpretamos, por tanto, que también las que puedan viajar juntos en un coche privado.