El Procedimiento Mundial Armonizado para Ensayos de Vehículos Ligeros (WLTP, por sus siglas en inglés) entró en vigor en Europa el 1 de septiembre de 2018 como un nuevo método para medir el consumo y las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de los vehículos teniendo en cuenta datos de conducción más reales.
La norma WLTP sustituye a la prueba anterior, el ciclo NEDC (el New European Driving Cycle establecido desde 1992). La norma WLTP determina la información sobre el consumo de combustible mediante un ensayo objetivo que refleja el comportamiento real de conducción por carretera, algo que no cumplía el ciclo NEDC, una prueba estipulada hace muchos años bajo las condiciones propias de un laboratorio. El nuevo procedimiento WLTP se ha establecido teniendo en cuenta datos reales de conducción de Europa, EE.UU. y Asia y representa la realidad que se puede encontrar cualquier conductor de una manera más significativa.
En el nuevo ciclo de homologación WLTP, respecto a las anteriores pruebas NEDC, se puede establecer un comportamiento más acorde con la realidad, gracias a la mayor distancia del ciclo de pruebas (con un recorrido de 23,25 km frente a los anteriores 11 km), temperaturas ambientales auténticas o una mayor variedad de situaciones de conducción y de tráfico, entre otros.
Norma WLTP: entre un 20 y un 30 por ciento más de consumo/emisiones
Según las pruebas realizadas en modo WLTP, el consumo de combustible y las emisiones pueden aumentar entre un 20 y un 30 por ciento respecto a las anteriores pruebas NEDC, ya que se tiene en cuenta, según los test realizados por diversos fabricantes, la demanda de potencia necesaria conforme a las posibles circunstancias reales de conducción.
De esta forma, los datos de consumos y emisiones de CO2 homologados con norma WLTP mayores pueden tener una consecuencia directa sobre el precio final de los vehículos nuevos, ya que en muchos países europeos el porcentaje del impuesto de matriculación a aplicar se basa según los niveles de CO2. De esta forma, vehículos que con la norma NEDC estaban en un tramo impositivo del impuesto de matriculación pueden pasar al siguiente tramo impositivo con la norma WLTP y, por tanto, encarecerse.
En el ámbito europeo, se ha establecido una especie de transición en las que las autoridades comunitarias controlarán si los fabricantes de automóviles cumplen o no con los nuevos límites de emisiones de CO2. En el caso de que no cumplan, las marcas de coches afectadas podrían enfrentarse a fuertes sanciones económicas.
En Europa, de momento se ha llegado a un acuerdo institucional entre los veintiocho países que conforman la Unión Europea y el Parlamento Europeo para reducir las emisiones en 2030, establecidas en un 37,5% para los coches y en un 31% para las furgonetas, ambos valores en relación con los registrados en 2021. Ambas instituciones han pactado incluir un objetivo intermedio de reducción de emisiones en 2025, fijado en un 15% tanto para coches como para furgonetas.