En una conferencia en el Círculo Financiero de La Caixa, el ministro de Fomento ha defendido la política de inversión pública del Gobierno y ha advertido que "siempre que nos ataquen, nos defenderemos con datos".
Y su defensa se ha basado en un aspecto siempre delicado como es el de las relaciones entre Madrid y Cataluña. Según Cascos, "Cataluña debe crecer como mínimo al nivel de Madrid. La Generalitat debe estimularse con el ejemplo de Madrid y destinar sus inversiones a infraestructuras productivas".
Para apoyar sus palabras, Cascos aportó una serie de datos. Entre ellos destaca el hecho de que en Madrid las diversas Administraciones, sin contar con el Estado, invirtieron el año pasado más de 1.200 millones de euros en infraestructuras de transporte, en Cataluña, esas mismas Administraciones destinaron alrededor de 600 millones de euros.
"Resulta imprescindible que la administración autonómica catalana se active para seguir siendo una comunidad líder en la inversión en infraestructuras de España, superando la retórica propia del pasado que no tiene cabida en el actual modelo de Estado", ha indicado Cascos.
El ministro ha contrapuesto a la política de la Generalitat, el esfuerzo inversor del Ministerio de Fomento, que destinará a Cataluña el 19 por ciento de sus inversiones totales, frente al 15 por ciento que tenían previsto en un principio.