La frase es casi catastrófica y no la pronuncia cualquiera. “Los europeos no pueden comprar coches. No pueden ahorrar lo suficiente para hacerlo. Tenemos que hacer que la movilidad sea más accesible y necesitamos volver a la época de los coches pequeños". La ha pronunciado en las últimas horas Luca de Meo, el CEO de Renault, y razón desde luego no le falta. Porque además no llegan de un visionario, sino que coinciden con los pronósticos que se hacen también por los grandes expertos de España.
Los precios de los coches se dispararán en 2025
Coincidiendo con esta visión sobre el automóvil en Europa, la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (GANVAM) insistió ayer también en el impacto negativo que va a tener además en 2025 la entrada en vigor de las nuevas normativas de emisiones de CO2, avisando de que “el precio de los coches se disparará en 2025”.
Esta realidad, imparable, será consecuencia de las multas que se impondrán el año que viene desde Bruselas por los incumplimientos en los objetivos de CO2 de los fabricantes, un problema además agravado por la previsión de que no habrá repunte en las ventas de coches electrificados que puedan reforzar a las marcas. Por ello, desde GANVAM piden ya abiertamente a la UE que reconsideren sus nuevas normativas si no quieren hundir más a una industria que ya está suficientemente debilitada en Europa.

En un encuentro con los medios de comunicación, el propio presidente interino de GANVAM, Gerardo Cabañas, ha explicado que bajar las emisiones de CO2 a solo 93,6 gramos por kilómetro, como está previsto, provocará un encarecimiento real de los coches por las multas que tendrán que asumir los fabricantes al no poder cumplir la mayoría con estos objetivos de Bruselas. La realidad, como siempre, será que se trasladará al consumidor el sobrecoste de las pérdidas por sanciones y del estancamiento de las ventas de coches de combustión en el mercado.
Los coches han subido sus precios más de un 30% desde la pandemia
El problema agravado es que este sobreprecio estimado se sumará al ya efectivo experimentado en el sector del automóvil desde la pandemia y tras la crisis de los semiconductores, que ha reflejado finalmente en el mercado una subida en los precios de los coches de hasta el 30% respecto a los años anteriores al Covid-19.
Para 2025, como hemos anticipado, la patronal de distribuidores no prevé tampoco un repunte de las ventas de coches electrificados, que podría ser una tabla de salvación para la industria. Desde Ganvam calculan ya que este tipo de tecnologías ni siquiera alcanzarán el 13% del total de ventas del mercado, por lo que derivado de ello se esperan ya multas que ascenderán a nada menos que 15.000 millones de euros entre las marca automovilísticas al no poder cumplir por tanto los objetivos marcados en las emisiones contaminantes de cada fabricante.

2024 cerrará con el mercado superando el millón de matriculaciones
Para este año, en cambio, GANVAM, a falta del cierre de diciembre, prevé un crecimiento positivo de las matriculaciones en España para el mercado global. La patronal estima así que el volumen de negocio total supere finalmente el millón de unidades, calculándose exactamente en torno a las 1,02-1,03 millones de unidades, que supondrían un incremento de casi un 10 por ciento respecto al año 2023 anterior. Por primera vez desde 2019 el sector superaría la barrera sicológica del millón de unidades, lo que es una gran noticia.
Sin embargo, y como también hemos adelantado, este nivel de crecimiento de operaciones no se repetirá en 2025, tal y como pronostica ya GANVAM. La reducción en la oferta de motores de combustión podría derivar de nuevo en un mercado por debajo del millón de matriculaciones, según las estimaciones de la patronal de distribuidores. Esperemos que estas malas previsiones no se terminen por confirmar.