Vicente, que ha hablado así tras visitar las plantas de Veriña y Avilés en las que se reunió con responsables de Recursos Humanos de la siderurgia, ha indicado que, según la propia compañía, el próximo día 19 hay un reunión con todo el Grupo en Madrid para renovar el ERE en el primer trimestre de 2012. Una noticia que no es 'halagüeña de ninguna de las maneras', a su juicio, aunque ha añadido que se debe valorar las previsiones de retomar la carga de trabajo en el segundo trimestre al nivel de antes de este verano pasado.
Asimismo, ha indicado que a las plantas asturianas no se les permite tener stock, por lo que trabajan sobre pedido. Ha reiterado que, en este contexto económico, el ERE se ve como 'mal menor', al no darse por restringida la relación laboral.
Se ha mostrado más optimista con las inversiones que va a realizar Arcelor en sus plantas asturianas, algunas ya en ejecución, y en especial con los 147 millones de euros para las Baterías de Coque, que garantizan la estabilidad de la planta y todo el entorno, que, en conjunto, dan empleo a unas 30.000 personas.
Ha hecho alusión, además, a las elecciones sindicales que se celebrarán los próximos días 15, 16 y 17 en Arcelor y ha apuntado que los trabajadores deberán de valorar qué han hecho los sindicatos este tiempo.
A este respecto, ha apostado por la regeneración sindical y ha agregado que las subvenciones recibidas por las organizaciones no contribuyen a ser independientes. Vicente ha señalado que los trabajadores tienen en las elecciones una oportunidad importante de decidir el modelo que se quiere. Además, ha recalcado que USO sigue en su apuesta decidida de rejuvenecer la plantilla a través de los contratos relevo.
Por otro lado, ha hecho un llamamiento al próximo Gobierno nacional, para que decida claramente la estrategia industrial que se quiere adoptar y le ha recomendado apostar, especialmente, por la industria siderúrgica, el sector del automóvil, el energético y la I D. Vicente ha aclarado que no quiere desmerecer a otros sectores con ello, pero ha dejado claro que 'no se puede estar repartiendo café para todos'.
