En su intervención ante los delegados que asisten a la segunda jornada del XII congreso del PSC, Navarro también ha garantizado, como viene haciendo desde hace semanas, que si lidera el PSC incluirá en la ejecutiva a Joan Ignasi Elena, a Àngel Ros y a Miquel Iceta, aunque los dos últimos hayan retirado su candidatura.
Navarro, que es el favorito para hacerse con la primera secretaría del PSC, ha reivindicado el catalanismo entendido como la defensa de los intereses de los ciudadanos y de Cataluña ante otros, y ha aplaudido la 'autocrítica' que hizo ayer José Montilla, un gesto que le 'honra', ha dicho.
Ha asegurado asimismo que, aunque las formas en el PSC 'ya han comenzado a cambiar' en este congreso, hay que acentuar ese proceso, y ha añadido: 'Las formas han de cambiar'.
En este contexto, ha advertido de que las primarias abiertas a la ciudadanía que el PSC organizará para elegir a su candidato a la Generalitat no pueden ser 'una obra de teatro', porque, si no, la renovación del partido 'no será creíble'.
'La cultura organizativa de este partido tendrá que hacer un esfuerzo para cambiar', ha asegurado Navarro en la presentación de su proyecto a sus compañeros de partido.
También ha prometido que afrontará 'la revisión de la relación con el PSOE', y ha defendido que el PSC debe hacer el mismo discurso político en todas partes, en Cataluña y en Madrid.
En este punto, ha reivindicado la 'visibilidad' del PSC en el Congreso, y el acuerdo sellado por los alcaldes de Lleida, Àngel Ros, y Sabadell, Manuel Bustos, para pedir que el PSC pueda votar diferente que el PSOE en el Congreso en asuntos que atañen a Cataluña.
Al final de su discurso, Navarro ha adoptado un tono más personal y ha asegurado que, aunque algunos creyeran que asumir ahora las riendas del PSC era 'complicarse la vida', Cataluña y el PSC requerían que algunos se arremangaran.