La industria alemana toma aire. El retraso de la entrada en funcionamiento del nuevo peaje para camiones había puesto en entredicho al sector tecnológico germano, hasta el punto de obligar al Gobierno a anunciar su intención de rescindir el contrato con el consorcio Toll Collect, debido a múltiples problemas técnicos. Ahora, sin embargo, esta decisión queda suspendida ante el nuevo acuerdo alcanzado por el canciller Gerhard Schroeder y la empresa gestora.El nuevo compromiso prevé la puesta en marcha del sistema en dos fases hasta el 1 de enero de 2006 y, en él, las empresas se comprometen a pagar compensaciones de hasta 1.000 millones de euros por cada año de retraso. Hasta el momento, Toll Collect había ofrecido un máximo de 600 millones de euros al año como indemnización, pero ahora pagarán 780 millones si no está listo el sistema el 1 de enero de 2005, y 1.000 si no lo está en la segunda fase.El anuncio del acuerdo lo realizó ayer Schroeder, acompañado de su ministro de Transportes, Manfred Stolpe, y de los presidentes de DC, Jurgen Schrempp, y Deutsche Telekom, Kai-Uwe Ricke, integrados en el consorcio Toll Collect. Todos ellos reconocieron la necesidad de llegar a un nuevo compromiso para salvar la reputación de la industria germana “en Alemania, en Europa y más allá", según las propias palabras del canciller.El presidente de DaimlerChrysler calificó el proyecto de difícil e interesante y reconoció que ha resultado en principio “más difícil de lo que todos esperamos", por lo que “ha habido retrasos muy de lamentar". “Ahora, estamos convencidos por el concepto y seguros de que es factible", declaró Schrempp.Actualmente, cada mes de retraso de la entrada del nuevo sistema acarrea unas pérdidas de 180 millones de euros a Alemania, por la consiguiente caída de recaudación. Al margen de esta cantidad, el Gobierno de Schroeder estimó que una suspensión definitiva del sistema supondría pérdidas de hasta 8.000 millones de euros.
El peaje alemán para camiones, en marcha otra vez
Finalmente, todo indica que a comienzos de 2005 entrará en funcionamiento en Alemania el innovador y polémico peaje para camiones. El canciller Schroeder anunció ayer un nuevo acuerdo con Toll Collect, la empresa gestora del sistema de pago, lo que anula la rescisión del contrato de explotación prevista por problemas técnicos. El consorcio se compromete ahora a pagar compensaciones de hasta 1.000 millones por cada año de retraso.
