Se avecinan tiempos de subida de los precios de los combustibles, especialmente para el diésel. La Fundación Alternativas presentó ayer en el Congreso el informe “Impuestos energético-ambientales en España: situación y propuestas eficientes y equitativas" en el que se aboga por la equiparación de los impuestos del gasóleo a la gasolina y por la equiparación de ambos con los que tienen los países de nuestro entorno europeo. El informe tiene especial importancia porque aunque independiente, la Fundación Alternativas, no deja de ser un laboratorio de ideas próximo al PSOE.
La primera medida, equiparar el impuesto de hidrocarburos del litro de gasóleo con el de gasolina, -que sugiere el informe que debería tomarse a corto plazo-, supondría una **recaudación extra de unos 2.600 millones de euros **, permitiendo además una reducción del 1,6 por ciento del consumo agregado y las emisiones agregadas.
La segunda, que debería tomarse a medio plazo y que supondría equiparar progresivamente los impuestos de España con los del resto de países de nuestro entorno como Alemania, Francia, Italia y Reino Unido supondría recaudar unos 10.000 millones de euros extras y rebajar el consumo de combustibles en un 6,1 por ciento.
El informe elaborado por Alberto Gago, Xavier Labandeira, José Manuel Labeaga y Xiral López, habla de una serie de anomalías en el sistema fiscal español con bajos tipos impositivos. Se lamenta de que este impuesto ha quedado desactualizado al no haberse sometido al IPC. Así, se señala que la última modificación de los tipos impositivos estatales sobre gasolina y gasóleo del impuesto sobre hidrocarburos tuvo lugar en 2010, momento desde el cual los precios del gasóleo y la gasolina han aumentado un 12,7% y un 11,5% respectivamente, mientras el peso de este impuesto ha caído un 4,5% en el primer caso, y un 5,8% en el de la gasolina.
Pero el informe va más allá: propone a largo plazo al hilo de la transformación del sector a pensar en una fiscalidad vinculada a las externalidades ambientales, que mantenga la recaudación y que se aborden los problemas de congestión y el uso de las infraestructuras. El informe también propone “crear un impuesto global y automático sobre los vehículos basado en tecnologías de geolocalización y con una estructura tarifaria múltiple". En este caso, se incluirían medidas como el peaje de acceso a determinadas zonas o infraestructuras, gravamen de la distancia recorrida y tipos variables en función del uso horario. Y por supuesto la tarifa impositiva variaría en función del tipo de vehículo (emisiones, antigüedad….) y la zona geográfica, es deicr, el pago por uso.