La importancia que Mercedes da a las redes sociales y a su piloto estrella la ha dejado patente Toto Wolff cuando ha argumentado que tienen al piloto con más tirón mediático (5,8 millones en Twitter, 18,8 millones en Instagram y 5,1 millones en Facebook), que han hecho mucho por la F1 en estos últimos años y no se les reconoce económicamente en el reparto del futuro.
Por esa razón de momento Mercedes no firma el nuevo acuerdo marco que debe regir la F1 del futuro. El resto de equipos están ya listos para firmar. Wolff está apostando fuerte, quizás incluso demasiado, lo mismo que Lewis Hamilton, que por el momento dice que no hay prisa para firmar la renovación. Esta posición de fuerza de Mercedes debe estar soportada desde Alemania, que es realmente quien manda, y si no es así, tanto el austríaco como el británico se podrían quedar sin empleo. Seguramente que los rivales de Mercedes estarían encantados de que Mercedes se “fuera a casa”, especialmente después de ver que si esta temporada se quitaran a los dos coches negros, la igualdad sería máxima.
Jean Todt lo primero que hizo en el tiempo de pandemia fue abolir la regla de la unanimidad para evitar posiciones de fuerza de un solo equipo, como lo que intenta hacer Mercedes pensando en el Pacto de la Concordia. La posible aparición de un nuevo equipo ruso, sostenido por Dmitry Mazepin, padre del piloto de F2 Nikita Mazepin, podría salvaguardar los 20 equipos en caso de espantada de Mercedes a partir de 2022. El ruso no concretó la compra de Williams en su momento la de Force India (le ganó la partida Lawrence Stroll), especialmente porque su hijo aún no tiene la súper licencia para la F1, aunque a final de este año podría tenerla, sobre todo si sigue ganando en F2, racha que ha comenzado en Silverstone.
Nikita Mazepin ha hecho miles de kilómetros al volante de los Mercedes de F1 de hace dos temporadas en circuitos de Gran Premio, para llegar bien preparado a la F1. Se habló mucho de que el ruso podría comprar la estructura de Mercedes, con Hamilton incluido, y no hay que descartar ninguna hipótesis de cara al futuro.
Toto Wolff y Mercedes están jugando y apostando fuerte, se supone que con buenas cartas (gestionadas desde Alemania) y apoyándose en Lewis Hamilton y también en sus millones de seguidores. En esto de las redes sociales hay mucho que discernir y habría que saber si los millones de seguidores del seis veces campeón son todos aficionados a la F1 y potenciales compradores de Mercedes, o son solamente seguidores de Lewis Hamilton, y tanto la F1 como el lujo y exclusividad que representa Mercedes, les da exactamente igual.
En pocas semanas veremos si Mercedes logra que se ceda a sus pretensiones económicas y en caso de negativa, ¿cuál será su actitud?...
