Según la revista Autosport, varios equipos de Fórmula 1 van a pedir aclaraciones a la FIA acerca de la reglamentación en lo que al apartado de difusores se refiere. Esto se debe a que los monoplazas de Williams y Toyota para este 2009, presentan un diseño peculiar de esta parte del coche. Hay que recordar que el tamaño y la posición del difusor de los Fórmula 1 ha sido cambiada este año por el reglamento como parte de la reducción aerodinámica impuesta este año. De esta forma, las turbulencias que generarán los F1 serán menores, permitiendo, junto con los nuevos alerones, que los monoplazas se sigan de cerca en las curvas rápidas, tratando de facilitar los rebufos y, por tanto, los adelantamientos.Según parece, los difusores traseros del Williams y del Toyota superan los 175 mm de altura límite que ha de tener por reglamento en alguno de los puntos de la pieza. En el caso de Williams, la parte central del difusor es mucho más baja, con una segunda sección que si tiene la altura requerida. Por su parte, el Toyota cuenta con un difusor que tiene una zona de 15 centímetros de ancho vacía en el centro del coche, donde a los equipos se les permite anclar parte de la carrocería. Esto crea un canal de aire debajo del coche que puede proporcionar un agarre extra.El resto de los equipos de la parrilla quieren que la FIA aclare si lo que han hecho estas dos escuderías es legal, ya que la ventaja de rendimiento, sobre todo en las curvas lentas, podría ser importante. Renault ha sido el primer equipo en pronunciarse ante las posibles irregularidades de dos de sus competidores. “Sus difusores son ciertamente interesantes, aunque no puedo comentar nada acerca de su legalidad. Es algo que debe hacer la FIA. Nosotros preguntaremos sobre ello a la FIA, pero no todavía", dijo Pat Symonds, ingeniero jefe del equipo de Fernando Alonso. Esta negativa de Symonds acerca de consultar a la FIA ahora acerca de las posibles irregularidades de sus rivales se debe a que las protestas oficiales, por las cuales los equipos infractores pueden ser sancionados, solamente pueden llevarse a cabo durante un Gran Premio. En el periodo de pretemporada lo único que pueden hacer las escuderías es preguntar a la FIA acerca de la legalidad de los elementos de los monoplazas rivales para así valorar si incorporarlos al suyo propio.Los numerosos cambios en la normativa provocan este tipo de situaciones, donde los equipos no tienen claros algunos de los puntos del reglamento, o donde simplemente tratan de llevar las normas hasta las últimas consecuencias, lo cual ha sucedido siempre. Estos dos casos de presunta ilegalidad se suman a las protestas de algunos equipos sobre el sistema de escapes del F60 de Ferrari. Los tubos de escape, según la mayoría de equipos, deben estar carenados en 2009, pero en el Ferrari sobresalen por encima de la carrocería. Sin embargo, desde Maranello aseguran que preguntaron a la FIA acerca de esto antes de construir el sistema de escapes, y desde la federación les dieron el visto bueno. Veremos a ver en que quedan todas estas protestas, porque seguro que no serán las únicas durante este año.
¿Coches ilegales?
Tras las declaraciones de diversos jefes de equipo asegurando que el sistema de escapes del Ferrari F60 es ilegal, ahora las sospechas se centran en el difusor de Williams y de Toyota, cuyo diseño podría haber violado las restrictivas normas aerodinámicas que regirán la competición desde 2009.
