De los dos días de pruebas que tenía previsto el equipo Renault para Fernando Alonso, el asturiano solamente pudo completar el primero, ya que la jornada de ayer tuvo que ser cancelada por la incesante lluvia que cayó sobre el trazado de Portimao. Tan solo Sebastian Buemi intentó salir a primera hora de la mañana a los mandos de su Toro Rosso, pero tras la segunda vuelta de instalación tuvo que desistir. Poco después, y ante la imposibilidad de que el helicóptero médico volase, la jornada de test se dio por concluida. Hablando de Toro Rosso, cada vez parece más claro que el segundo volante del equipo será de nuevo para Sebastian Bourdais, que tendrá una segunda oportunidad de demostrar su calidad en la máxima categoría tras los cuatro títulos obtenidos en la Champ Car.Alonso aprovechó la jornada para enseñarle todos los entresijos del equipo Renault al ciclista español Carlos Sastre y al resto de sus compañeros, los cuales devolvieron la visita que ya realizase Alonso el pasado martes para entrenar en bicicleta con ellos. Además, Fernando realizó las siguientes declaraciones tras la cancelación de las pruebas: “¡Una jornada pasada por agua! Es una pena que no hayamos podido hacer nada hoy porque en esta fase de la temporada hay que intentar aprovechar al máximo el tiempo de pista disponible. Pero a pesar de todo estoy satisfecho de la jornada de ayer en la que sí pudimos rodar sobre seco y recoger algo de información. Volveré a subirme al coche en el próximo test de Jerez, donde espero que podamos hacer progresos en el rendimiento del coche".Por otra parte, Ferrari si que pudo realizar un test provechoso en Mugello. Después de tres días pasados por agua, Felipe Massa pudo llevar a cabo el primer test serio sobre seco del F60. Pese a sufrir una salida de pista, el brasileño logró parar el crono en 1:23.981, en la mejor de las 103 vueltas dadas al trazado italiano. La sesión debió concluir un poco antes de lo previsto debido a un fallo hidráulico del Ferrari. “Estoy satisfecho con estos dos días de entrenamientos," comentaba el brasileño al acabar los entrenamientos. “Finalmente hoy hemos podido probar el coche en una pista seca y consistente. Las primeras impresiones son positivas, a pesar de que obviamente aún es muy pronto para hablar de a qué nivel estamos, sobre todo porque aún no nos hemos podido comparar con nuestros rivales. Sin embargo, si me pides que le ponga una nota a estos test, le pondría un ocho en fiabilidad, ya que hemos cubierto unos 1500 kilómetros. Es cierto que gran parte de ellos se han completado sobre mojado, pero teniendo en cuenta las condiciones que se han dado en Portimao, creo que la decisión de venir a Mugello fue la acertada."El equipo que más suerte está teniendo con la climatología es BMW, que ha vuelto a apostar un año más por el circuito de Cheste para realizar sus test. Pese al fuerte viento reinante en la jornada de ayer, el polaco Robert Kubica volvió a completar una larga y provechosa sesión donde continuaron los desarrollos del nuevo F1.09. Debido a ese viento, el equipo ha decidido hacer pruebas centradas en la fiabilidad, además de varias simulaciones de salidas. “Mientras por la mañana la climatología ha sido buena, por la tarde lamentablemente ha hecho mucho aire y nos ha dificultado las cosas" explicaba Kubica, que ha realizado un total de 116 vueltas al trazado de Cheste. “Aún así, hemos obtenido algunos resultados interesantes que nos ayudarán a entender a entender mejor el comportamiento del BMW Sauber F1.09". El trabajo de Kubica ha concluido por esta semana, y será Nick Heidfeld quien tome el relevo en las jornadas de hoy y mañana.
Alonso, descanso obligado
Fernando Alonso, así como el resto de las escuderías presentes en Portugal, tuvieron una jornada de descanso obligado debido a la torrencial lluvia que cayó sobre el circuito luso. Por su parte, Ferrari disfrutó de una buena climatología en Mugello y BMW pudo seguir probando el F1.09 en Cheste pese al fuerte viento.
