Viernes por la tarde-noche, o fin de semana, en cualquier pueblo o ciudad española. Vas a recoger tu coche para acompañar a los niños al fútbol, salir a cenar o pasar el día en la montaña y… ¿dónde están las dos matrículas de mi coche? De inicio, te quedas perplejo, mirando hacia todos los lados y sin saber qué ha ocurrido. Pero, enseguida, te das cuenta: no es ni mucho menos una broma: me han robado las dos matrículas.
El robo de matrículas es hoy, por desgracia, una práctica muy habitual y cada día más frecuente. Estos días nos ha tocado sufrirlo en Autopista.es con uno de nuestros coches de pruebas, en este caso un nuevo Kia Cee´d 1.0 T-GDI con un nuevo motor gasolina de 3 cilindros y 120 CV. Primer problema: tienes un coche inmovilizado; segundo problema: debes ir lo más pronto posible a denunciarlo. El tiempo corre en contra.
Nada más percatarnos del robo de las matrículas, consultamos rápidamente a fuentes de la magistratura y a la propia Policía Nacional: “En casos como éstos, lo primero que tenéis que hacer es denunciarlo lo más rápido que podáis. Una práctica hoy muy habitual es emplear el robo de matrículas para cambiar las de otro coche y estafar en gasolineras. Sucede, y con frecuencia, sobre todo a finales de mes”. Otro posible “modus operandi” es, obviamente, utilizar esas placas de matrícula sustraídas para dar un robo o cometer un alunizaje. Incluso para utilizarlas en vehículos que luego son vendidos a terceros países. Hay que estar pues atentos.
Robo de matrículas: qué hacer
Si es tu coche, no en nuestro caso donde todo se complica, no tendrás mayor problema. Denuncia el robo y, con todos tus papeles del coche (otra cosa será si también te han abierto el coche y te los han robado, aunque no es lo habitual), puedes acudir a cualquier centro autorizado para que te hagan tus placas de matrícula nuevas: ya podrás volver a circular sin problema y todo quedará en el incordio y susto inicial.
Eso sí, a partir de ahí, no creas que todo ha podido acabar. En muchos casos, no. Si algún vehículo llega a circular posteriormente, y durante largos períodos de tiempo, con tus placas de matrícula robadas y comete infracciones de circulación, la Administración se dirigirá al titular que figure en el Registro de Vehículos: es decir, a ti. En estos casos, las fuentes consultadas nos aconsejan formular los correspondientes pliegos de descargos, aportando la denuncia del robo presentada en su día en Comisaría.
Como ves, el robo de matrículas es un problema real y que puede convertirse en todo un quebradero de cabeza para la víctima. Nosotros, en esta ocasión, lo hemos sufrido esta semana, trastocándonos además muchos de los planes de trabajo previstos. Lo peor, ya no es eso: es saber, además, que puede en ese momento estar cometiéndose un grave delito con tus placas de matrícula.
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