Hasta hace poco, uno de los principales problemas de los híbridos (junto al precio elevado y otros más subjetivos como el de la emoción) residía en el peaje que había que pagar en el apartado del espacio de carga. Toyota no tenía ningún modelo híbrido que disfrutara de una capacidad de transporte digna. Eso se solucionó con el Prius y se sigue con esa tendencia con el Auris Touring Sports que acabamos de conducir.
Lo primero que llama la atención, y de lo que están orgullosos en la marca, es que las cotas de maletero y espacio interior son las mismas en el híbrido y en las alternativas versiones Diesel y gasolina (la batería en la versión híbrido se almacena bajo el asiento trasero)
El maletero cubica 530 litros con una configuración convencional de los asientos y alcanza los 1.658 litros cuando abatimos los con un suelo bastante plano.
Nos han gustado las soluciones adoptadas en esta zona para hacer más cómodas y accesibles las maniobras de carga y descarga. En primer lugar, el Auris Touring Sports tiene una altura de carrocería bastante baja lo que facilita este tipo operaciones y a esto hay que sumar dos manetas que, desde el propio maletero, nos permiten abatir los asientos (en sección 60:40) con un solo movimiento y sin esfuerzo. Al mismo tiempo, la red separadora es fácilmente almacenable en el maletero (tiene un lugar específico) y se puede usar tanto horizontal como verticalmente (para protegernos de la carga cuando abatimos los asientos traseros).
El espacio en las plazas traseras se mantiene respecto al Auris de cinco puertas, con buenas dimensiones en anchura y espacio para las piernas, aunque con una altura que si van a viajar atrás personas que ronden el 1,90 m puede ser insuficiente.
El debut de la carrocería familiar en este Auris viene aparejado con una modificación en la amortiguación del eje trasero, ganando en firmeza, según Toyota, aunque nosotros no hemos notado diferencias notables respecto a un Auris convencional.
La gama del Toyota Auris Touring Sports está compuesta por un motor de gasolina (1.6 de 130 CV), dos Diesel (1.4D de 90 CV y 2.0D de 124 CV) y un híbrido de 136 CV. Esta última ha sido la variante que hemos podido conducir y las conclusiones han sido muy positivas. No nos engañemos, no es un coche que apasione por su conducción, pero sí es un automóvil cómodo, seguro y con unos consumos muy reducidos.
Toyota declara un consumo mixto de 3,7 litros, que, nosotros, en una conducción normal, no hemos podido igualar. De hecho, en dos recorridos de más de 100 km por autopista, ciudad y carreteras secundarias, logramos 5,3 y 5,4 litros, respectivamente, que tampoco es nada desdeñable.
Gama y precios
Contará con tres acabados específicos, el Live (sólo para flotas, negocio en el que pone mucho acento la marca japonesa con este coche), Active y Advance (sólo disponible para el Diesel más potente y el híbrido) y diferentes packs de equipamiento para completar los elementos de serie del Auris.
La gama de precios va desde los 15.990 hasta los 23.460 euros, teniendo en cuenta campaña de lanzamiento y Plan PIVE. En general, tiene un sobrecoste de 1.200 euros respecto a las versiones parejas del Auris 5 puertas.
