Con muchos españoles viviendo la fase 1 de desescalada, se abren nuevas posibilidades de movilidad en coche dentro de una misma provincia. Si vuelves a coger tu vehículo después de varias semanas, sabrás, después de haberte estado avisando de que era necesario llevar a cabo unas tareas mínimas, que este puede haber sufrido algún problema relacionado con los neumáticos, la batería, el aire acondicionado, el limpiaparabrisas, los frenos…
De cara a evitar cualquier tipo de percance que pueda suponer circular con alguno de estos elementos dañados, debes extremar las precauciones. A continuación os trasladamos los consejos que nos da Acierto.com, quienes ponen un contexto que no acompaña mucho, para qué mentirnos: según el comparador de seguros, “2 de cada 5 conductores no realiza las revisiones estipuladas por el fabricante", ya sea por falta de tiempo (26,4 por ciento), por ser “demasiado caro" (18 por ciento) y otras razones.
Esto, como te imaginarás, podría repercutir en una avería o incidente inesperado en carretera. Además, hay que sumarle un factor importante y que influye negativamente, y es el envejecimiento del parque automovilístico español, que ronda los 12 años de media.
Pasos a seguir antes de volver a utilizar tu coche
Los neumáticos pueden haber sufrido durante este parón en el garaje o en la calle. Lo primero que debes hacer es revisar las presiones y su dibujo, asegurándote que no tengan ningún desgaste irregular. Acierto.com alerta de llevar un control adecuado de los neumáticos, nunca sobrepasando el límite de los 40.000 km, aunque esto variará según el uso que le hayamos dado. Habrá que revisar también la rueda de repuesto.
Comprobar el estado de los amortiguadores es importante después de tanto tiempo con el coche parado. Un truco sencillo es presionar el capó hacia abajo y soltar: si el coche oscila solo una vez, funcionan correctamente, pero si oscila de forma reiterada Acierto.com te recomienda cambiarlos.
Revisa las luces: todas, incluidas las antiniebla y los intermitentes.
La revisión de líquidos es también fundamental: la comprobación del limpiaparabrisas, así como de las escobillas, es sencillo, lo mismo para otros líquidos que podemos comprobar bajo el capó, como el refrigerante, el de frenos y aceite.
Cuando arranques el coche por primera vez, hazlo con prudencia: al girar la llave, si hay dificultades para arrancar, no insistas durante más de 5 segundos y espera un poco antes de volver a intentarlo. Una vez arrancado, antes de emprender la marcha, mantén el motor al ralentí durante 5-10 minutos para que las piezas recobren su movimiento habitual y se distribuyan bien los líquidos.
De cara a evitar cualquier problema futuro a corto plazo, deberías asegurarte que los filtros estén en un estado adecuado y limpios, tanto el del aire acondicionado, de combustible…
Los frenos son clave, como los neumáticos, para nuestra seguridad cuando estamos circulando. Presta especial atención inicialmente a cualquier sonido anómalo y por si se alarga la frenada en exceso.
La batería es uno de los elementos que más sufren estos parones y una de las protagonistas de las asistencias en carretera. Para ello, deberíamos habernos asegurado antes de haber arrancado el coche de forma habitual. Aquí te damos otros consejos sobre cómo arrancar el coche si se ha quedado sin batería.
