10 maneras poco conocidas de ahorrar combustible al conducir

Conducir de forma eficiente está al alcance de todos, tengas el coche que tengas. Estas 10 maneras poco conocidas por los conductores, seguro, te ayudarán.

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10 maneras poco conocidas de ahorrar combustible al conducir
10 maneras poco conocidas de ahorrar combustible al conducir

1. Ventanillas subidas y aire acondicionado controlado.

Sí, es cierto, cuando conduces con las ventanillas bajadas puedes evadirte del calor sofocante en verano, por ejemplo, o llevando el aire acondicionado a tope. Sin embargo, son medidas poco prácticas a la hora de ahorrar combustible. En ciudad a velocidades lentas quizás sí te compense llevar las ventanillas bajadas, pero no a velocidades altas porque la resistencia aerodinámica es mayor. En el caso del aire acondicionado, lo ideal sería llevarlo siempre a una temperatura de entre 23 y 24 grados, donde la exigencia al motor es menor.

 

2. Comprueba la presión de los neumáticos.

Debes revisar la presión de los neumáticos de tu coche al menos una vez al mes o antes de un viaje largo. Lo ideal es circular con la presión recomendada por el fabricante: un neumático con baja presión consume más que otro que las lleve en los niveles ideales. Además de ayudarte a reducir el consumo de combustible, evitará reventones y pinchazos. Cuestión de seguridad.

Ventanillas subidas y aire acondicionado controlado

3. Conducción eficiente y anticipada.

Parece una obviedad, pero pocos conductores parecen llevarla a cabo. Lo ideal para contener el consumo de combustible es llevar siempre una velocidad constante, evitando los acelerones o frenazos en la medida de lo posible, reduciendo así la velocidad de manera progresiva. Anticípate al tráfico, observando todo lo que ocurre delante de ti y evaluando la situación para actuar eficientemente, y mantén la distancia de seguridad con el coche de delante.

 

4. Controla el cuentarrevoluciones.

En coches de gasolina, es recomendable llevar la aguja del cuentarrevoluciones entre las 2.000 y las 2.500 rpm; con motores Diesel, el intervalo ideal es entre 1.500 y 2.000 rpm. Controlar las revoluciones de tu coche puede ayudarte, y de qué manera, a ahorrar combustible. Ten en cuenta que a partir de los 100 km/h, el consumo aumenta hasta en un 16 por ciento. Si tu coche no tiene cuentarrevoluciones, utiliza estas referencias: tercera velocidad a partir de 30 km/h, cuarta a 40 km/h, quinta a 50 km/h y sexta a 60 km/h.

5. La marcha adecuada en el momento indicado.

A revoluciones del motor bajas, utiliza la marcha más larga y con el pedal del acelerador pisando en 3/4 de su recorrido. La primera velocidad es la que más gasta, así que utilízala el menos tiempo posible; tampoco circules con el acelerador pisando hasta el fondo si quieres un mayor ahorro.

En subidas, retrasa todo lo que puedas las reducciones de marcha, incrementando la presión sobre el acelerador. Circulando con más inercia en las bajadas, adelanta el cambio de marchas a revoluciones menores a las recomendadas anteriormente, y rueda con la marcha más larga posible.

 

6. En el tráfico, apaga el motor en paradas prolongadas.

Lo recomendable en las paradas prolongadas es que apagues el motor de tu coche, cuando estimes que vas a estar parado más de un minuto, en un gran atasco o en un paso a nivel, por ejemplo. Ten en cuenta que el consumo de combustible cuando el motor está al ralentí es de 0,5-0,7 litros a la hora.

 

7. No vayas a por el pan en coche.       

A menos que esté a mucha distancia, claro. Lo que queremos decir es que no debemos hacer todos los trayectos de nuestro día a día en coche si no son necesarios. Recomendación: si son distancias de menos de 3 kilómetros, es más económico (y saludable) ir en transporte público… o andando.

Cuidado con los excesos… de equipaje

8. Cuidado con los excesos… de equipaje.

Tan importante es llevar el peso necesario en tu coche como saber colocarlo correctamente. Los excesos de equipaje son uno de los factores que más hacen incrementar el consumo de nuestro coche. También no llevarlo repartido equitativamente por el interior del coche, contribuyendo además a una menor estabilidad de marcha del coche. Ten en cuenta también que, con más peso, las distancias de seguridad se incrementan en caso de frenada de emergencia.

 

9. Cierra bien la tapa del depósito tras repostar.

Es importante que cierres el tapón del depósito de tu coche después de un repostaje, para evitar que se pueda evaporar y gastes innecesariamente combustible. Respecto al hecho de repostar en gasolineras más o menos conocidas, ten en cuenta que todas cumplen con los mínimos de octanaje que marca la ley; la única diferencia son los aditivos que cada compañía utiliza en el ‘producto’ final. Nuestra opinión es que no notarás diferencias en el consumo de tu coche.

 

10. Mantenimiento correcto y a tiempo de tu coche.

Al igual que otros consejos que te hemos dado, no sólo por ahorro de combustible, sino por seguridad. Si llevas un mantenimiento correcto de tu coche, como por ejemplo el estado de los filtros, aceite y estado general del vehículo, notarás que tu coche es más eficiente.

Cierra bien la tapa del depósito tras repostar

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