Bergé Automoción ha asumido desde el pasado 1 de enero la importación de la marca Tata en España, culminándose un año largo de negociaciones con los dirigentes del fabricante indio y con el hasta ahora importador Nissho Motor España. El primero en decidirse a vender sus acciones a Bergé Automoción fue el exministro de UCD, Salvador Sánchez Terán, y posteriormente fue su socio Juan Ballesteros quién también optó por ceder la suya.
Al frente de la importadora de Tata se va a colocar Eduardo Divar, un veterano de Bergé con una larga experiencia en Chrysler-Jeep, a donde llegó desde Peugeot. Actualmente el español es, después del Reino Unido, el segundo mejor mercado de Tata en Europa.