No era algo en lo que me hubiese fijado hasta el pasado sábado, pero está ahí y te avisa sin avisarte… Quizás mucho de los conductores que conduzcan este Toyota Auris híbrido en nuestro #Enrodaje no se den ni cuenta, pero en el cuadro de mandos, en el “reloj” de la izquierda, el que nos habla de cómo está trabajando nuestro coche –cargando, eco o power- la aguja, blanca en las dos primeras fases, muta a naranja en cuanto entramos en zona power, en cuanto le estamos exigiendo proactividad máxima al coche. Alertados quedamos… Ya será cuestión nuestra levantar el pedal del acelerador si nuestras prisas o estilo de conducción nos lo permite…
Pero aprovechando el modo eco que aletarga todos los elementos que pueden incidir en el consumo para que seas el rey del miniconsumo, no será fácil encontrarte con esa aguja frontal en naranja –no hay opción de rojo por muy mal que lo hagas-. Si buscas más pimienta activando el modo de conducción Power junto al minipomo del cambio, será otra cosa, el coche es más alegre, más proactivo al pedal derecho aunque a costa de tu eficiencia.
Definitivamente no vamos a negar la evidencia ni a corregir a nadie: esta versión del Toyota Auris no ha nacido para correr -para eso tienes otras parejas de baile más danzarinas en la gama Toyota-, ha nacido para dar placer de otra manera... No es un producto de gimnasio, de musculación vía pesas… es un producto más de pilates, de yoga… de esas nuevas filosofías que te cultivan el cuerpo de otra manera, no a base de sudor sino de meditación y dominio y control de tu cuerpo, de tener siempre presente tu objetivo –movilidad con el mínimo esfuerzo… y coste-. Y esto lo borda el Toyota Auris Hybrid. Arrancar en eléctrico ya es una declaración de intenciones –la entrada del motor de combustión en marcha se camufla bastante ante el ruido de rodadura-, quieres que la paz se mantenga el mayor tiempo posible y luchas por ello, picándote contigo mismo –sin perder la cabeza ni haciéndosela perder a otros, simplemente afinando y anticipando-, picándote con los que te preceden al volante –mi arranque es viendo los 5,5 l/100 que me deja el conductor anterior… Ya tengo reto, bajarlo-. Dos recorridos mientras le voy cogiendo el tacto ligeramente por encima de los cinco litros, dos por debajo… Última prueba, 44 kilómetros por carretera de doble sentido y los últimos 7 en ciudad. 3,6 l/100 km, ¡el consumo medio homologado por la marca! Casualidad pura. Orgulloso de este último resultado aunque viendo en alguna ocasión la aguja naranja en alguna cuesta. Seguro que la próxima vez yo lo puedo hacer mejor –el coche ya pone todo lo que sabe para lograr más por menos-. El reto de rebajar día a día el consumo te lo sirve en bandeja este Auris Hybrid.