Quizás te hayas preguntado alguna vez si es la Guardia Civil, la Policía Local o algún otro cuerpo policial el encargado de poner multas de tráfico en la carretera. Pues bien, deberías saber que existen diferentes autoridades competentes que pueden sancionar en materia de tráfico: la DGT, la Guardia Civil, los agentes de la policía local de una determinada localidad o los agentes autonómicos de Cataluña, País Vasco y Navarra.
A este respecto, la Dirección General de Tráfico nos aclara en qué “terreno” actúa cada uno de estos órganos competentes, ya que puede variar en función del tipo de vía. Y recuerda que, como recuerda la propia DGT, el procedimiento sancionador debe ser iniciado “por una autoridad competente que entienda que se ha cometido una infracción”, pero que puede ser por iniciativa propia o por la denuncia de otros agentes encargados de la vigilancia del tráfico o por “cualquier persona que tenga conocimiento de la misma”.

Así pues, lo habitual es ver a los agentes de la Guardia Civil en carreteras convencionales, por ejemplo, y a la Policía Local en las calles de la ciudad; pero no siempre es así. Resolvemos todas las dudas al respecto:
- Siendo la DGT como órgano administrativo, puede interponer multas a través de la Guardia Civil o de sus propios medios, como los radares. Su radio de actuación se centra, principalmente, en las vías interurbanas y en las travesías cuando no exista policía local en esa localidad. Su cometido es el de denunciar y sancionar las infracciones a las normas de circulación, en lo relativo a las condiciones técnicas de los vehículos y al Seguro Obligatorio
- En Cataluña, los Mossos de Esquadra; en el País Vasco, la Ertzaintza; y en Navarra, la Policía Foral. Estos agentes se encargan de vigilar y de multar en vías interurbanas y en travesías sin policía local; en sus respectivas comunidades autónomas, claro, y con las mismas competencias que los agentes de la DGT antes mencionadas.
- Los Ayuntamientos también tienen la autoridad competente para multar en materia de tráfico a través de sus agentes de policía local. Estos pueden ordenar, controlar y vigilar el tráfico, denunciar las infracciones cometidas en estas vías y aquellas que no estén atribuidas expresamente a otra Administración.