4x4

Land Rover Defender 90 TD5

El Land Rover Defender es aquel coche robusto que fue creado para el campo y no lo oculta. Subsiste en un mercado en el que los todo terreno han avanzado hacia vectores diferentes. El Defender es para el campo. En carretera, y ya no decimos en ciudad, no está a gusto. El conductor, tampoco. El motor es bueno y tira lo suficientemente bien, pero es ruidoso. En campo es un tipo duro, seguramente uno de los más duros. Land Rover no lo cambia porque se debe seguir vendiendo lo suficiente, aunque a nuestro juicio debería costar mucho menos para valer mucho más.

Land Rover Defender 90 TD5
Land Rover Defender 90 TD5

En el segundo renglón, desde hace ya mucho tiempo, se sustituyeron las tradicionales ballestas por los muelles. Estos últimos son mucho mejores en casi todos los sentidos, como por comportamiento en carretera, comodidad, etc. Aunque no pueden competir con la robustez de las ballestas en el único momento en que son buenas, que es cuando están cargadas, son preferibles los muelles; si se llegan a vencer, se cambian y ya, pero mientras tanto aportan una efectividad mucho mayor, lo que se traduce en seguridad y comodidad en la conducción, que es mucho más importante, se mire por donde se mire.

En carretera se agarra más de lo que se piensa, porque, por ejemplo, no balancea mucho. Lo que ocurre es que no transmite confianza por la altura a la que se está, porque el centro de gravedad es más alto de lo normal, porque la dirección es lenta, con ese típico pequeño retraso de los vehículos industriales, y porque los ejes rígidos nunca han sido un prodigio de efectividad en carretera. Por eso, en comportamiento no llega a lo que muchos vehículos de su tipo pueden hacer en carretera; algunos con un compromiso realmente bueno, pero no tan bueno en campo.

El Land Rover Defender cuenta con carrocería corta (90) y larga (110). Con esas dos batallas, un solo motor de 122 CV y diferentes configuraciones (incluido un pick-up), el Defender ofrece 8 distintas posibilidades: Land Rover Defender 90 TDI techo lona 3p: 22.650 euros. Land Rover Defender 90 TDI techo metálico 3p: 23.950 euros. Land Rover Defender 110 TDi 3p: 25.900 euros. Land Rover Defender 90 TDI Extrme 3p: 31.000 euros. Land Rover Defender 110 TDI HCPU 3p: 23.000 euros. Land Rover Defender 110 TDI SW 5p: 27.900 euros. Land Rover Defender 90 TDI Pick-UIp 4x4: 20.550 euros. Land Rover Defender TDI Pick-Up: 21.800 euros

El Defender está pensado por y para el campo y no lo esconde. Es un auténtico “todocampista" y poco le importa lo demás; no hay prácticamente mezcla entre vehículo todo terreno y de ciudad, como la mayoría actual de los 4x4. En carretera va bien, incluso mejor de lo que puede pensarse por su altura (en muchos garajes no cabe), pero no puede decirse que sea ningún ejemplo. En campo hay muchos motivos por los que este Defender es bueno. El bastidor es el tradicional de vigas donde se ancla la carrocería. Cada día quedan menos 4x4 así porque, entre otras muchas razones, cada día se utilizan menos en campo. Aquí reside una de las principales ventajas de la robustez de este modelo. Luego, y lo volvemos a citar, es bastante alto. Tiene unas ruedas muy grandes (7,50). Con eso se pasa bien por muchos lugares y, en el caso del 90 (batalla corta), por muchos más, con más garantías y con menos “miedo psicológico". Le sigue que el motor tiene buenos bajos, lo que, unido a una caja tránsfer adecuada, con bloqueo de diferencial central, provoca que las labores más costosas en el camino sean menos difíciles de sortear. Trepa bien y los ángulos tradiciones (entrada, salida, ventral…) son muy buenos. Casi no existe el miedo a la hora de abordar el camino. La altura al suelo hace difícil golpear el cárter, que además está protegido. Con la pintura no metalizada, las llantas de chapa, la ausencia de aditamentos externos de la carrocería que de nada sirven en campo más que para estorbar, y partes muy robustas o poco expuestas a golpes (paragolpes firmes y faros altos y muy resguardados), hay menos miedo de pasar después por el taller. Es entonces cuando se valora este vehículo tal como es, y es entonces cuando se justifica un vehículo así.En carretera/ciudad hay que pagar un coste alto por llevar un vehículo nostálgico. En primer lugar, la comodidad no existe; por lo menos como se entiende que tiene que ofrecerse actualmente.