Pocos detalles permiten diferenciar al Toyota Prius AWD-i de tracción integral de la versión de dos ruedas motrices. Apenas la luneta trasera un poco menos oscurecida, los pilares B en color negro piano y ese mismo tono en la zona de la consola central permiten reconocerlo. Y otro tanto sucede con el motor eléctrico sobre el eje trasero, que apenas merma la capacidad de maletero, y queda tan oculto a la vista como discreto es en su funcionamiento.
De hecho, como sucede con la interacción del motor eléctrico delantero y su homólogo térmico, circulando sobre asfalto seco se manifiesta de manera sólo visible si tenemos seleccionada la pantalla de visualización y consultamos el porcentaje de par que hay en cada eje. Cuestión diferente sería arrancar en zonas húmedas, resbaladizos adoquines o sobre charcos. Porque, entonces, ese segundo motor actúa, y mejora la motricidad en la arrancada, hasta los 10 km/h, y seguiría estando presto a intervenir hasta alcanzar los 70 km/h, desconectándose al superar esa velocidad. De ahí la similitud en potencial de ganar o mantener velocidad, como en el consumo.
El Toyota Prius AWD-i te lo te hace fácil
El Prius AWD-i abunda en el comportamiento de los híbridos de Toyota, de los que el Prius es su gran embajador. De ahí que manifieste su preferencia por la conducción relajada y una actuación sobre el acelerador sutil que facilita la interacción entre los motores eléctricos y térmico, evitando la clásica fuerte sonoridad al acelerar a fondo.
PRESTACIONES | Toyota Prius 1.8 AWD-i 122 CV |
Acel. 0-100 km/h | 12,37 s |
Acel. 0-1.000 m | 33,53 s |
Sonoridad 120 km/h | 70 dBA |
Sonoridad 140 km/h | 73 dBA |
Frenada desde 140 km/h | 81 m |
Peso en báscula | 1.518 kg |
En el interior, no pierde habitabilidad respecto al Prius de dos ruedas motrices. Los 77 cm de espacio de piernas atrás son una cifra magnífica. Mantiene los tres modos de conducción y el cambio sigue conservando su opción B que aumenta la retención y la respuesta del motor. Por otro lado, resulta fácil habituarse a la instrumentación en posición central.
CONSUMOS | Toyota Prius 1.8 AWD-i 122 CV |
Consumo en ciudad | 4,7 l/100 km |
Consumo en carretera | 5,5 l/100 km |
Consumo medio | 5,2 l/100 km |
Los 2.700 euros de sobrecoste respecto del Prius 2WD añaden al AWD-i un plus de exclusividad que, posiblemente, no se repercuta en toda su extensión si esta tecnología pasa a modelos como el C-HR o el Corolla. Porque, basados en la misma arquitectura que el Prius, no sería para nada de extrañar que a medio plazo ambos automóviles pasaran a lucir el siempre interesante argumento de una tracción a las cuatro ruedas, con el añadido de que la batería nunca llegaría a agotarse. A diferencia de algunos híbridos enchufables AWD.
ESPACIO | Toyota Prius 1.8 AWD-i 122 CV |
Anchura delantera | 138 cm |
Anchura trasera | 133 cm |
Altura delantera | 94/100 cm |
Altura trasera | 95 cm |
Espacio para piernas | 77 cm |
Maletero | 440 litros |
Toyota Prius 1.8 AWD-i: sus claves
-El sistema AWD-i apoya en las arrancadas, hasta 10 km/h, y cuando hay pérdidas de motricidad en el eje delantero circulando hasta 70 km/h.
-Cuesta 2.700 euros más que los Prius de dos ruedas motrices y apenas hay variación en el consumo y prestaciones verificadas.
-El sistema global de seguridad Toyota Safety Sense añade reconocimiento de peatones, de señales y control de crucero adaptativo, aunque carece de conectividad para smartphones.
Toyota Prius 1.8 AWD-i: nuestra conclusión
Siendo el Prius el emblema de la tecnología híbrida, convence que haya sido el encargado de estrenar la tecnología AWD-i. Apenas gasta un poco más, corre lo mismo y aporta un plus de versatilidad.