Toyota Avensis 2.2 D4-D 150 CV

Hay coches que son más rápidos, algunos tienen un comportamiento más excitante y otros son más baratos. El Avensis de Toyota, con su nuevo motor Diesel de 150 CV, no es el mejor en nada, pero en conjunto es una de las berlinas más completas y atractivas del segmento.

Toyota Avensis 2.2 D4-D 150 CV
Toyota Avensis 2.2 D4-D 150 CV

Hasta hace poco, el Avensis competía en inferioridad con el resto de berlinas medias del segmento, pues carecía de una mecánica Diesel verdaderamente potente. Sus rivales tenían en sus respectivas gamas motores de gasóleo que superaban con creces los 130 CV, mientras que el modelo japonés tenía que conformarse con “apenas" 116 CV, aunque este motor era y es muy digno. La respuesta nipona se ha retrasado, pero ha sido contundente. Toyota ha lanzado para el Avensis dos mecánicas Diesel de 150 y 177 CV, que sitúan ahora a este modelo como uno de los más “dotados" entre las berlinas de gasóleo del segmento.Ambas versiones comparten motor, un bloque de 2,2 litros. Las únicas diferencias son que el propulsor de 150 CV no tiene inyectores piezoeléctricos (posee unos convencionales) y carece de la tecnología de bajo nivel de emisiones D-CAT (Diesel Clean Advanced Technology). El 2.2 de 150 CV cumple con creces con lo que se espera de él. Es un motor suave, que sube muy bien de vueltas y es muy silencioso. Además, es un propulsor que, a pesar de su cilindrada, no tiene un consumo demasiado elevado. Si lo comparamos con sus rivales, no es el más rápido del segmento, aunque sí está entre los puestos de cabeza, con mejores cifras en aceleraciones que en recuperaciones. En este capítulo, las diferencias con sus rivales naturales no son abismales, ni mucho menos. Solamente el 320D, que cuenta con 163 CV, puede vanagloriarse de ofrecer unas prestaciones mucho mejores, Donde si ocupa un puesto de honor es en el apartado de la sonoridad. Es uno de los propulsores más silenciosos del segmento, junto con el Honda Accord, que al ralentí es menos ruidoso; y el BMW 320D, que iguala el ruido que hace a 160 km/h.El consumo está en la media de este tipo de mecánicas, sin que se alcancen, según las mediciones de nuestro Centro Técnico, los 7 litros a los 100 km en ciclo combinado. No encontramos, en grandes líneas, ninguna fisura destacable al funcionamiento de esta mecánica, pues la verdad nos ha encantado por lo equilibrada que es: tiene potencia suficiente como para no echarla de menos, consume bastante poco y el ruido no parece ser un problema. Con este motor, el Avensis se convierte en un verdadero devorador de kilómetros, ideal para desplazamientos largos por buenas carreteras, donde nos gusta (y podemos) ir razonablemente deprisa y no queremos que el consumo se convierta en excesivo.En este tipo de recorridos el Avensis es ideal, pues está muy bien insonorizado, algo que unido al ya de por sí silencioso motor, completan un panorama de sosiego para el conductor y los ocupantes. Sólo el ruido aerodinámico cuando viajamos muy deprisa puede romper la “tranquilidad sonora" que se vive en el interior de la berlina de Toyota. Hasta hace poco, el Avensis competía en inferioridad con el resto de berlinas medias del segmento, pues carecía de una mecánica Diesel verdaderamente potente. Sus rivales tenían en sus respectivas gamas motores de gasóleo que superaban con creces los 130 CV, mientras que el modelo japonés tenía que conformarse con “apenas" 116 CV, aunque este motor era y es muy digno. La respuesta nipona se ha retrasado, pero ha sido contundente. Toyota ha lanzado para el Avensis dos mecánicas Diesel de 150 y 177 CV, que sitúan ahora a este modelo como uno de los más “dotados" entre las berlinas de gasóleo del segmento.Ambas versiones comparten motor, un bloque de 2,2 litros. Las únicas diferencias son que el propulsor de 150 CV no tiene inyectores piezoeléctricos (posee unos convencionales) y carece de la tecnología de bajo nivel de emisiones D-CAT (Diesel Clean Advanced Technology). El 2.2 de 150 CV cumple con creces con lo que se espera de él. Es un motor suave, que sube muy bien de vueltas y es muy silencioso. Además, es un propulsor que, a pesar de su cilindrada, no tiene un consumo demasiado elevado. Si lo comparamos con sus rivales, no es el más rápido del segmento, aunque sí está entre los puestos de cabeza, con mejores cifras en aceleraciones que en recuperaciones. En este capítulo, las diferencias con sus rivales naturales no son abismales, ni mucho menos. Solamente el 320D, que cuenta con 163 CV, puede vanagloriarse de ofrecer unas prestaciones mucho mejores, Donde si ocupa un puesto de honor es en el apartado de la sonoridad. Es uno de los propulsores más silenciosos del segmento, junto con el Honda Accord, que al ralentí es menos ruidoso; y el BMW 320D, que iguala el ruido que hace a 160 km/h.El consumo está en la media de este tipo de mecánicas, sin que se alcancen, según las mediciones de nuestro Centro Técnico, los 7 litros a los 100 km en ciclo combinado. No encontramos, en grandes líneas, ninguna fisura destacable al funcionamiento de esta mecánica, pues la verdad nos ha encantado por lo equilibrada que es: tiene potencia suficiente como para no echarla de menos, consume bastante poco y el ruido no parece ser un problema. Con este motor, el Avensis se convierte en un verdadero devorador de kilómetros, ideal para desplazamientos largos por buenas carreteras, donde nos gusta (y podemos) ir razonablemente deprisa y no queremos que el consumo se convierta en excesivo.En este tipo de recorridos el Avensis es ideal, pues está muy bien insonorizado, algo que unido al ya de por sí silencioso motor, completan un panorama de sosiego para el conductor y los ocupantes. Sólo el ruido aerodinámico cuando viajamos muy deprisa puede romper la “tranquilidad sonora" que se vive en el interior de la berlina de Toyota.