Skoda Superb Combi

Un maletero de récord, un confort de marcha notable y unas mecánicas más que atractivas convierten a la versión familiar del Skoda Superb en un modelo muy a tener en cuenta. Calidad a buen precio sigue siendo el lema de la marca.

Skoda Superb Combi
Skoda Superb Combi

El nuevo Skoda Superb Combi es una alternativa bastante interesante para quienes necesiten una gran capacidad de carga. Se trata de la versión familiar del Skoda Superb y añade, además de un maletero excepcional, un diseño de aspecto más deportivo. Llegará al mercado en enero de 2010 y su precio será 500 euros superior al de la berlina, en el caso del acabado básico Comfort, y 700 euros en el caso de las terminaciones Ambition y Elegance, que incluyen barras de techo y raíles en el maletero.

Las motorizaciones disponibles serán las mismas que para el Skoda Superb berlina, excepto el 1.9 TDI de 105 CV, que no llegará con la carrocería familiar Combi. El escalón de acceso es un 2.0 TDI de 140 CV, todavía con tecnología bomba-inyector y algo más ruidoso que la versión 2.0 TDI de 170 CV que completa la gama Diesel y emplea sistema common-rail. El segundo puede incorporar tracción a las cuatro ruedas mediante un embrague Haldex de cuarta generación, un elemento que estará disponible en el resto de modelos salvo en el 1.4 TSI de gasolina, de 122 CV. En el medio de las mecánicas de gasolina está el 1.8 TSI de 160 CV, un cuatro cilindros que proporciona un alto agrado de uso gracias a su refinamiento, elasticidad y nivel prestacional. Incorpora cambio manual de seis marchas o, en opción, DSG de 7 velocidades. Quien necesite más potencia puede optar por el V6 3.6 FSI, de 260 CV, que incorpora de serie DSG de 6 velocidades y tracción total. Skoda anuncia para este modelo una capacidad de arrastre de hasta 2.000 kg, además, el ESP incorpora función de estabilización de remolque. También pueden equipar cambio DSG de 6 marchas los motores 2.0 TDI, tanto el de 140 CV como el de 170 CV.Una vez en marcha, el Skoda Superb Combi destaca por su buen tacto general, ya que todos los mandos resultan muy precisos. Ni siquiera los motores básicos transmiten vibraciones al habitáculo y la suavidad de los Diesel, pero sobre todo los de gasolina, convierten al Skoda Superb Combi en un coche muy refinado, a lo que hay que sumar una elevada comodidad de suspensiones, ya que cualquier bache se absorbe sin problemas. A velocidades legales es un modelo bastante silencioso, aunque el ruido de rodadura se incrementa más de lo deseable si elevamos el ritmo de viaje, lo que nos obliga a elevar la voz para hablar, algo que se nota más en el 2.0 TDI de 140 CV. A pesar de ser muy confortable, la estabilidad se encuentra en un nivel notable y la carrocería no balancea en exceso en las curvas. Sin embargo, debido a su larga batalla no es un modelo especialmente ágil en zonas de curvas. Pese a todo, se defiende bastante bien en todo tipo de trazados y en carreteras reviradas se agradece la buena capacidad de tracción del tren delantero, que proporciona eficacia a la salida de los giros. En general es muy equilibrado y da confianza en todo momento.

El interior es típico de Skoda, es decir, funcional, con buenos materiales y ajustes, pero sin excesos en el diseño. Hay mezcla de plásticos duros y blandos, y los acabados están bien rematados. La visibilidad es buena hacia todos los ángulos y el espacio longitudinal disponible permite que todos los pasajeros estiren las piernas como si fueran en una limusina. La anchura, en cambio, no es tan generosa y en los asientos traseros tres adultos irán algo justos. Sin duda, lo más espectacular es el maletero, de nada menos que 633 litros. Sus formas son muy regulares y la boca de carga queda a un nivel muy bajo, por lo que se puede aprovechar perfectamente toda su capacidad. Además, dependiendo de los acabados, cuenta con raíles para organizar la carga mediante separadores móviles, ganchos para colgar bolsas y un doble fondo opcional. También dispone de una linterna extraíble de tipo LED. Abatiendo los asientos traseros se logra una superficie de carga plana con 1.865 litros de volumen; para ello hay que plegar primero las banquetas y después los respaldos, a diferencia de otros modelos actuales en los que basta con un único movimiento. En definitiva, es un coche bien hecho, práctico y refinado, con un precio muy competitivo.