Ya es realidad la renovación del Golf, que vendrá sucedida en poco tiempo por la del León. A lo largo de sus distintas ediciones, este relevo generacional siempre ha sido un momento muy esperado y, quizá por eso mismo, no sería la primera vez que la expectativa generada superase al producto final. Dicho de otro modo, el buen nivel general de las ediciones salientes deja el listón tan alto en algunos apartados, que los modelos venideros no lo tienen fácil para mejorar en absolutamente todos los ámbitos. Lógicamente, en conjunto serán superiores los recién llegados pero, ¿acaso la calidad de rodadura, el agrado de uso y el tacto de la dirección del Golf V tenía algo que envidiar a su sucesor?
Seat León, Skoda Scala y VW Golf: el “enemigo" en casa
Por otra parte, es en la fase final de su vida comercial cuando ya se han pulido posibles defectos, optimizado mecánicas y añadido algunos de los elementos de equipamiento, seguridad y conectividad más demandados. Precisamente por esto, ahora que están en plena forma podría ser un momento idóneo para caer en la tentación de ofertas comerciales interesantes. Y a río revuelto... el nuevo Scala aprovecha para aterrizar en un momento estratégico, lanzándose de pleno, por planteamiento y dimensiones, en medio del segmento compacto. Comparte algunas mecánicas con Golf y León, e incluso plataforma MQB, pero en este caso hace uso de su variante A0, algo más simplificada. Sería, por tanto, equivalente a un Polo o un Ibiza “agrandado", y de ahí su competitivo precio, aunque lo cierto es que, descuentos puntuales y promociones aparte, las tres marcas proponen versiones de acceso de facturas muy similares, con teóricos precios de tarifa prácticamente idénticos en el caso del motor tricilíndrico 1.0 TSI de 115 CV: 21.000 € el León, 20.830 € el Scala y 21.320 € el Golf. Teniendo en cuenta que en el caso del Golf ya solo quedan unidades en stock (y probablemente en breve ocurrirá lo mismo con el León), las ofertas pueden ser muy suculentas, por lo que sus precios —más que nunca— pueden ser muy variables.
PRESTACIONES | Seat León 1.5 TSI 130 CV | Skoda Scala 1.5 TSI 150 CV DSG7 | VW Golf 1.5 TSI Evo 150 CV DSG7 |
Acel. 0-100 km/h | 8,99 s | 8,02 s | 8,08 s |
Acel. 0-1000 metros | 30,16 s | 29,51 s | 29,2 s |
Sonoridad 100 km/h | 67,4 dBA | 66,9 dBA | 66,8 dBA |
Sonoridad 120 km/h | 69,6 dBA | 69,1 dBA | 69,9 dBA |
Frenada desde 120 km/h | 54,78 m | 54,3 m | 53,65 m |
Peso en báscula | 1.287 kg | 1.310 kg | 1.333 kg |
Seat León, Skoda Scala y VW Golf: refinamiento técnico
Analizados por separado, los tres son productos impecables, pero es al cambiar de uno a otro en un corto espacio de tiempo cuando surgen matices y diferencias más o menos relevantes entre ellos, que se pueden acrecentar según el acabado seleccionado, la motorización, e incluso opciones como los amortiguadores adaptativos. Sin ir más lejos, algo que nos ha llamado la atención de este último elemento, siempre muy recomendable, es que tanto en el León como en el Golf se mantiene un grado de confort muy aceptable incluso en el programa de conducción más dinámico, mientras que en el Scala la suspensión se vuelve excesivamente seca al seleccionar el modo Sport.
CONSUMOS | Seat León 1.5 TSI 130 CV | Skoda Scala 1.5 TSI 150 CV DSG7 | VW Golf 1.5 TSI Evo 150 CV DSG7 |
Consumo en ciudad | 6,3 l/100 km | 6,6 l/100 km | 7,1 l/100 km |
Consumo en carretera | 5,2 l/100 km | 5,1 l/100 km | 5,2 l/100 km |
Consumo medio | 5,7 l/100 km | 5,7 l/100 km | 5,9 l/100 km |
Al mismo tiempo, las reacciones del bastidor en situaciones muy exigentes son más naturales y controlables en Golf y León; en el caso del Scala las ayudas electrónicas deben tomar antes las riendas de la situación y el tren trasero redondea menos el giro, por lo que, si la conducción a realizar va a ser muy dinámica, resulta menos gratificante el modelo checo, que además permite mayores oscilaciones de la carrocería y resulta más impreciso. Entre Golf y León las diferencias son menores, pero también las hay. El tacto de dirección está algo más cuidado en el Volkswagen, gracias a un movimiento más fluido y preciso en la zona central. Además aporta algo más de confort debido a unos tarados de suspensión ligeramente más suaves, a costa, eso sí, de sacrificar algo de eficacia al límite. El toque extra de deportividad del León, sobre todo en el acabado FR, queda patente en las pruebas adicionales que hemos realizado (test del Alce y frenada asimétrica), donde demuestra lo bien afinado que está, tanto por chasis como por electrónica. Su bastidor es el más aplomado, seguido muy de cerca por el Golf.
ESPACIO | Seat León 1.5 TSI 130 CV | Skoda Scala 1.5 TSI 150 CV DSG7 | VW Golf 1.5 TSI Evo 150 CV DSG7 |
Anchura delantera | 142 cm | 138 cm | 142 cm |
Anchura trasera | 134 cm | 133 cm | 135 cm |
Altura delantera | 95/101 cm | 95/105 cm | 91/98 cm |
Altura trasera | 96 cm | 93 cm | 96 cm |
Espacio para piernas | 75 cm | 76 cm | 75 cm |
Maletero | 390 litros | 442 litros | 380 litros |
Menos diferencias encontramos en sus motores, donde hay versiones para casi todos los gustos y bolsillos. Un punto de equilibrio con el que resulta difícil equivocarse es el caso de los 1.5 TSI, ya que cubren cualquier necesidad, tanto por agrado de uso y eficiencia (especial mención a la versión Bluemotion de 130 CV del Golf que aparece en las fotos, el único con turbo de geometría variable y parada del motor al circular en modo inercia) como por prestaciones, siendo las variantes de 150 CV un compromiso perfecto para quien busca dinamismo. Si nos decantamos por los Diesel, los 2.0 TDI, ya sea asociados al cambio DSG o con transmisión manual, son buena opción, muy suaves y frugales, aunque con los años y las normativas anticontaminación han ido perdiendo algo de garra. Los 1.6 TDI, menos agradables y prestacionales, conviene ligarlos al cambio DSG de 7 marchas para dotarles de más relaciones y algo más de dinamismo, pues en el caso de los manuales, salvo versiones concretas, únicamente cuentan con 5 marchas (algo ya subsanado en el Scala, que dispone de 6 marchas). Otras versiones interesantes a las que no nos importaría “echar el guante", máxime si es con un sustancial descuento, son las denominaciones GTI, R o Cupra. Y no nos olvidemos del e-Golf, posiblemente el eléctrico más confortable de los que han pasado por nuestras manos.