Saab 9-3 TiD 150 CV

La nueva mecánica Diesel 1.9 de 150 CV incorporada en el Saab 9-3 le ha dado mucha vida al modelo sueco. Ahora es más potente y refinado, más suave y agradable de conducir.

Saab 9-3 TiD 150 CV
Saab 9-3 TiD 150 CV

La llegada de la mecánica 1.9 de origen Fiat Multijet le ha sentado de maravilla al Saab 9-3. Se ha rejuvenecido y revitalizado de un plumazo respecto al anterior 115 CV de origen Opel. Se trata de la conocida y alabada mecánica 1.9 JTD (aunque Saab mantiene la denominación TiD) de inyección directa de combustible mediante sistema de conducto común (common rail) de segunda generación –1.600 bares y hasta cinco inyecciones por ciclo- con turbocompresor de geometría variable e intercooler. Además, esta versión de 150 CV dispone de dos árboles de levas y culata multiválvula.El resultado sobre el papel es muy bueno, pero mejor aún lo es en la práctica. Nuestro Centro Técnico ha medido una potencia máxima de 157,5 CV y una cifra de par máximo que supera los 30 mkg entre 2.250 y 3.750 rpm, lo que le confiere un margen de utilización amplio y aprovechable. Como la mayoría de las mecánicas de ciclo Diesel, por encima de 4.000 rpm la respuesta comienza a decaer y a 4.500 llega el corte.Además, cuenta con una caja de cambios de seis relaciones, muy bien escalonadas, que permite sacar un buen partido del motor. Las cinco primeras son bastante cerradas, mientras que se deja una sexta más larga para desahogar el motor en viajes por autopista, sin que se resientan los consumos o el nivel de ruido se dispare. No obstante, la buena respuesta del motor permite engranar sexta en tramos de carretera en los que la pendiente no sea muy pronunciada (el desarrollo de 6ª a 1.000 rpm es de 54 km/h). Nos ha gustado bastante el manejo de la palanca, que permite engranar las marchas con rapidez y facilidad mediante movimientos cortos y rápidos.Las cifras de consumo que ha registrado nuestro Centro Técnico son realmente buenas: 5,1 litros/100 km en carretera, 6,2 litros/100 km en autopista a 120 km/h y 8,2 litros/100 km en ciclo urbano. Extraordinarias para una mecánica que rinde más de 150 CV reales.A esta destacable característica de la mecánica tenemos que añadir su buena respuesta (contundente a partir de 1.600 rpm) y el bajo nivel de ruido que llega al interior del habitáculo: 49 decibelios al ralentí y 70 dB si circulamos a 120 km/h.Con esos mimbres es lógico que las prestaciones en carretera sean destacables. Baste recordar que acelera de 0 a 100 km/h en 8,9 segundos, que alcanza el kilómetro con salida parada en 30 segundos o que recupera en 4ª velocidad desde 40 km/h en 32 segundos para recorrer 1.000 metros. Pero es que en 5ª hace el mismo ejercicio en 35,1 segundos y las cifras de adelantamiento son, si cabe, mejores (si quieres conocerlas al detalle, pincha en la pestaña “Nuestros Datos" de la parte superior).El comportamiento mecánico se encuentra a la altura del resto de los apartados. No es el mejor de la categoría, pero sí está a buen nivel. Como comentábamos al principio, comparte gran cantidad de elementos comunes con el Opel Vectra. No tienen plataformas idénticas, pues el modelo alemán ofrece un poco más de distancia entre ejes y unas vías sensiblemente más anchas, pero sí recurren al mismo esquema de suspensiones, con sistema McPherson con triángulo inferior en el eje delantero y multibrazo en el trasero con barra estabilizadora.El tarado de las suspensiones es muy equilibrado, pues contiene bastante bien los movimientos de la carrocería y no trata mal a los ocupantes. Resuelve de forma satisfactoria el difícil compromiso entre estabilidad y comodidad, sin ser demasiado seca en los movimientos.Lo que nos ha parecido algo más incómodo es la dirección. No por su rapidez o dureza (permite un diámetro de giro de 10,8 metros y tiene 2,8 vueltas entre topes), sino por las vibraciones o golpes que se trasmiten al volante cuando circulamos por carreteras con el firme rizado o en mal estado. En esta situación, se aprecia un golpeteo que no transmite buenas sensaciones. No pasa nada extraño en la trayectoria, pero no resulta agradable. Incluso en situaciones de mucha demanda de potencia a la salida de una curva, la falta de motricidad se acusa claramente en el volante.Por su parte, el equipo de frenos, con discos ventilados de 285 milímetros en el tren delantero y macizos de 285 mm en el trasero, no presentan grandes problemas para detener el coche, pero sí acusan ciertos síntomas de fatiga ante usos intensivos y prolongados. El tacto del pedal es bastante bueno y permite dosificar con facilidad.En general, nos ha gustado bastante este 1.9 TiD, nos parece un modelo diferente, exclusivo y original, que ofrece un elevado nivel de prestaciones con unos consumos muy contenidos.
Un coche ideal para viajar con comodidad sin tener que rascarse el bolsillo, aunque inicialmente sí que haya que hacer un importante desembolso económico.